En su discurso de apertura de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, el intendente de Paraná, Adán Humberto Bahl, no obvió referencias a la herencia recibida de su antecesor, Sergio Fausto Varisco, y principalmente el desmadre financiero que dejó en la Municipalidad. Al respecto, recordó que uno de sus primeras acciones de gestión fue ordenar el caos administrativo y económico.
Como en 2020, Bahl eligió el Teatro 3 de Febrero para pronunciar su discurso, pero en contexto de pandemia la asistencia de público fue mínima.
«La Municipalidad no es una corporación política», afirmó, e instó a «dejar atrás viejas prácticas» y ponderó la «sana administración». Al respecto, afirmó: «La política no puede estar nunca por encima de los principios de la sana administración. La mala política es una catástrofe para la ciudad. Demostramos que nuestra idea de cambiar de a poco la cultura de la corporación municipal no es solo posible, sino imprescindible».
La mayor parte del discurso se destinó a repasar la herencia y a contar cómo hizo la actual administración para poner a andar el Estado municipal tras la compleja transición de 2019, y en su preocupación por «restaurar el proceso de descreimiento del vecino a la política. No creer significa haber perdido la esperanza», y por eso dijo que sus políticas rectoras se asentaron en «ordenamiento administrativo, austeridad, y trabajo».
Recordó lo que supuso 2020, su primer año de gestión, «marco por la crisis sanitaria», que aún así no logró torcer el rumbo del objetivo trazado: «Asumimos un compromiso, ordenar la Municipalidad para avanzar en un proyecto colectivo de ciudad. Y eso fue lo que hicimos».
«Ordenar financiera y administrativamente el Municipio fue cuestión de primera necesidad. Por eso, antes de asumir, teníamos redactadas las ordenanzas de la emergencia económica, y de creación de una comisión revisora de deudas. Gracias a la implementación de este instrumento, el Municipio se ahorró 92 millones. Comenzamos el nuevo gobierno cumpliendo con lo que habíamos prometido: defender el patrimonio de todos los paranaenses», aseveró.
Pero dijo también que «a medida que organizábamos las finanzas, empezamos a invertir en equipamiento» que permitió rápidamente solucionar una de las herencias más duras del varisquismo: la crisis con la recolección de residuos: la adquisición de 11 camiones, la eliminación del turno noche, la implementación de GPS en todas las unidades para tener un monitoreo constante. Al respecto hizo alusión al «triste recuerdo de la basura amontonada».
«De ese dolor colectivo venimos. No lo podemos repetir. No podemos retroceder. Estamos decididos a enfrentar el futuro. Estamos obligados a pensar en la ciudad nueva, no en la que vimos», aseguró Bahl.
Habló después de la reactivación y ejecución de obras que qudaron paralizadas durante la administración Varisco. «Puedo sostener que este Municipio reactivó la mayoría de las obras iniciadas por la gestión anterior .De eso hablamos cuando decimos institucionalidad», subrayó. Luego, ponderó los proyectos de la actual gestión, de «caracter disruptivos, que no son producto del capricho, sino de la opinión de especialistas».
«Avanzamos en un plan de obras que responde a necesidades inmediatas de los vecinos, pero que también es resultado de la planificación de la ciudad capital hacia el futuro», aseguró, pero aceptó que «hay mucho por resolver. Es fundamental un plan de obra publica plan integral, que la proyecte en una visión metropolitana».
Habló de dos obras que se ejecutan con intervención de la Provincia y de la Nación: la finalización de la obra de Circunvalación y la próxima licitación del ensanche de Avenida Zanni, desde Avenida Almafuerte hasta Ricardo Balbín.
Habló también del plan de construcción de ciclovías, un plan de forestación, la obra de sistematización del arroyo Antoñico y la construcción de un puente sobre calle Manuel Galvez, y habló del compromiso de su gestión de destinar el 30% de los recursos a obra pública. Dijo también que su gestión dio «prioridad» a servicio de agua potable, y si bien señaló que la ciudad produce ese insumo para el doble de población que tiene, los problemas en el acceso subsisten. Para dar respuesta, anunció la construcción de pozos, cuya calidad es monitoreada de forma constante, la ampliación de la planta de calle Echeverría y la construcción de un nuevo centro de distribución en la zona sur de ciudad.
Bahl reiteró que está pronto a instrumentarse un nuevo sistema de estacionamiento medido, que se replicará el sistema de Ciudad Autónoma de Buenos Aires de bicicletas públicas y se crearán estacionamiento para rodados y anunció que en el servicio de transporte público se implementará el servicio «Cuándo Subo» en reemplazo de «Cuándo Llega».
De la Redacción de Entre Ríos Ahora