La escena es cada vez más corriente en la ciudad. Los contenedores reciben los desechos que vuelcan los vecinos pero también acogen a un sector cada vez más numeroso de paranaenses que se meten, literalmente, adentro de esos compartimentos de plástico en busca de supervivencia. Puede ser un mayor, un adolescente o toda una familia que revuelve, rebusca, selecciona, se lleva. De ahí adentro sacan lo que les sirve, lo que otros desechan. Así, ahora, este mediodía de sábado gris de invierno, sobre calle Monte Caseros.

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.