Dice que “algo dentro de mí me decía ´animate´”. Entonces, el cura Jorge Fontana, actual párroco de Nuestra Señora de Luján, de Paraná, se animó. En 2007 había llegado a Nogoyá como vicario de la Basílica Nuestra Señora del Carmen y de entonces data su relación con esa ciudad y su devoción mariana. “Acá, sentí que la Virgen me fue pidiendo, como que me decía que estaba ahí de una manera especial, todo eso avalado a su historia”, dice. Durante 13 años ha participado de una acción peculiar: la peregrinación que une Paraná con Nogoyá en ocasión de la fiesta de la Virgen del Carmen, el 16 de julio. En 2020, la peregrinación, contó, “fue totalmente virtual, si bien teníamos la idea de caminar, era imposible ingresar a las ciudades por los controles que había. Pero este año, al estar más permisivos los ingresos, decidimos caminar tres personas en representación de un centenar de peregrinos que lo hicieron de manera virtual. Fue como volver a hacerla por primera vez, porque fuimos el mismo número de peregrinos de aquella vez, caminamos en representación de 120 peregrinos virtuales en una experiencia linda. Esto de la virtualidad nos permitió estar en contacto permanente y en tiempo real con todos y sentir que caminábamos juntos”, contó. Fueron tres los peregrinos que este julio caminaron desde Paraná a Nogoyá, y el clima no acompañó. El clima fue adverso esta vez. Fue la primera vez que llovió durante toda una jornada. “Siempre teníamos alguna lluvia en tramos cortos, pero el 14 amaneció lloviendo y así siguió todo el día, sumando la niebla al atardecer”, recuerda, según recogió el sitio Paralelo 32.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora