Ni una palabra.
El expresidente del Sistema de Crédito Entre Ríos (Sidecreer), Juan José Canosa, declaró hoy durante largas dos horas ante los fiscales Santiago Brugo y Juan Malvasio. Antes, cumplió el trámite de rigor de cualquier reo: se practicó los análisis médicos con los forenses, se entintó los dedos y entonces sí acudió a prestar declaración indagatoria en una de las dos causas que tiene en la Justicia: negociaciones incompatibles con la función pública. La otra es por enriquecimiento ilícito.
Pero a la salida del edificio de Fiscalía, Canosa enmudeció. Sólo se entretuvo en el hall de ingreso con el exgobernador Domingo Daniel Rossi, quien acudió con su abogado Marciano Martínez por la causa de las cuentas en el exterior de su esposa, la exdiputada provincial Patricia Díaz. Luego de ese diálogo breve, Canosa salió con gesto serio, y no dijo palabra. Entre Ríos Ahora lo siguió, le formuló preguntas, pero el ahora funcionario de la Cámara de Diputados siguió hundido en el mutismo.
Raro: cuando ocupó la presidencia de Sidecreer, entre 2009 y 2015, Canosa tuvo un altísimo perfil mediático. Tampoco fue muy locuaz su abogado defensor, Raúl Barrandeguy. Si bien aceptó un diálogo con los periodistas, casi no contó nada. Citó el Código Penal y dijo que está prohibido “en forma terminante” relatar a la prensa lo que ocurrió. “Ha respondido todos los cargos, ha considerado toda la prueba de cargos, ha propuesto pruebas que lo favorecen, y eso es todos. Esperaremos a ver qué hace la Fiscalía”, dijo.
El fiscal Malvasio fue el encargado de explicar por qué Canosa fue hoy a Tribunales. “Hoy vino por el delito que se le imputa de negociaciones incompatibles”, detalló. “Respondió preguntas, hizo una declaración espontánea y luego respondió preguntas de la fiscalía y de la defensa”, reveló. No es el único imputado en la causa: en la misma situación están su Carlos Alberto Canosa, la suegra de éste, Mirta Graciela Gueler. También están imputados su cuñada, Alicia Susana Cuestas, la esposa de Carlos Alberto Canosa, y la hermana de su cuñada, María José Cuestas, y el esposo de la hermana de su cuñada, Diego Aníbal Urba.
La Justicia trata de establecer cómo fue que actuó Canosa desde Sidecreer para beneficiar con licitaciones y compras a firmas de familiares y amigos. Todos ellos citados a indagatoria en los viernes siguientes.
La investigación gira en torno a cómo hizo las contrataciones Canosa mientras presidió Sidecreer.
Canosa, eso se sospecha, no tuvo reparos en contratar con empresas de las que participan su hermano, su cuñada, la hermana de su cuñada, la madre de su cuñada, el esposo de la hermana de su cuñada.
Por ejemplo, le compró a su hermano, Carlos Alberto Canosa, a través de la suegra de éste, Mirta Graciela Gueler, U$S 262.300 en indumentaria y uniformes para el personal de Sidecreer.
También, negoció con su cuñada, Alicia Susana Cuestas, la esposa de Carlos Alberto Canosa, y con la hermana de su cuñada, María José Cuestas, y el esposo de la hermana de su cuñada, Diego Aníbal Urba –amigo de Juan José Canosa–, a través de Excelcom SA, otros U$S 635.000 dólares en insumos informáticos.
Mirta Gueler, suegra del hermano de Juan José Canosa, es la madre de María José y Alicia (presidenta y directora de Excelcom SA respectivamente), y es suegra también de Diego Urba, otro integrante de la sociedad anónima.
Esos datos los publicó el sitio www.noticiauno.com.ar.
A principios de diciembre, después de que el senador provincial Raymundo Kisser (Cambiemos) hiciera una presentación en la Justicia –y que supuso la piedra de toque que empujó la investigación sobre su crecimiento patrimonial—Canosa buscó aclarar su situación y concedió varias entrevistas. También habló con Entre Ríos Ahora.
Después de que dejó Sidecreer, el presidente de la Cámara de Diputados, el exgobernador Sergio Urribarri lo convocó, y ahora Canosa está a cargo de la Dirección de Asuntos Jurídicos de la Cámara de Diputados.
Dijo que no fue responsable del ingreso de las financieras en Sidecreer, aunque aceptó: “Tuvimos, por ejemplo, que vender cupones ¿Qué significa? Yo ahora no tengo dinero para pagar, el comercio necesita que se le pague, esos cupones se transfieren a una entidad bancaria y con ese dinero se le paga a los comercios. Fueron pocas veces. Dicen que eso provocó desfinanciamiento. Mentira. En todo caso lo que hace Sidecreer en ese caso es perder de ganar en esa operatoria”.
Claro pero a aquel reproche por el vaciamiento de Sidecreer, a la incursión de las financieras y a la sospecha por el crecimiento patrimonial de Canosa –expuesto en una denuncia hecha por un grupo de diputados de Cambiemos—se suma la investigación por el supuesto delito de negociaciones incompatibles con la función pública. O sea, de qué modo benefició a parientes y amigos desde el Estado.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.