La monja Martha Amelia Pelloni, titular de la ONG Infancia Robada, declaró este jueves en el juicio por trata de personas contra el publicista concordiense que se está llevando adelante en los tribunales de Paraná. La religiosa sostuvo que “Alfonzo, Cresto y el hijo del gobernador Urribarri son los tres nombres clave” de la historia. También mencionó a Fernando Rouger, del Copnaf. Dijo que este es un caso de “prostitución VIP” porque participaban funcionarios.
El caso de trata de personas por el que se está enjuiciando a Gustavo Darío Alfonzo en algún momento iba a tocar a la clase política. En la etapa preparatoria se reveló información que indicaba que funcionarios de gobiernos anteriores podrían ser mencionados durante el juicio que se está llevando adelante en la Justicia Federal de Paraná.
Ese momento llegó este jueves, cuando declaró Martha Pelloni. La religiosa reiteró ante el tribunal los nombres del ministro de Gobierno, Mauro Urribarri y el intendente de Concordia, Enrique Cresto, por sus vinculaciones con Alfonzo. Ya lo había hecho tiempo atrás en un foro organizado por la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) que se desarrolló en la provincia hace dos años.
“Alfonzo, Cresto y el hijo del gobernador Urribarri son los tres nombres clave” de la historia, declaró la monja y, enseguida, mencionó a Fernando Rouger, delegado del Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf) en Concordia. “Lo de Alfonzo es prostitución VIP y ha estado en todos los gobiernos y no sólo en el de Urribarri”, sostuvo Pelloni, que jugó un rol decisivo en el esclarecimiento del caso de María Soledad Morales en Catamarca a principios de la década del ’90 y que en la actualidad es coordinadora general de la ONG Infancia Robada.
“Yo pido que se haga justicia. Porque cuando hay que condenar a un hombre pobre por violación va preso enseguida, pero cuando hay funcionarios involucrados no se hace justicia”, apuntó la religiosa. Y aseguró: “La connivencia policial, judicial y política es algo común”.
La Policía también quedó señalada en el juicio que se sustancia por trata de personas. Matías Miguel Pereyra, un policía provincial que se presentó como promotor de espectáculos de boxeo, aunque se sospecha que participaba de la organización que integraba Alfonzo, quedó involucrado en la causa, ya que existen informes que lo señalan como la persona que trasladaba a las jovencitas a las distintas fiestas sexuales que organizaba el imputado; y también lo ubican entrando y saliendo del departamento del publicista cuando María se encontraba privada de la libertad.
María fue rescatada el 30 de octubre de 2014 del departamento que alquilaba Alfonzo. Ese día, Cristina Escobar, su madre, se presentó en la Comisaría del Menor y la Mujer de Concordia para denunciar que su hija de 16 años llevaba veinte días cautiva en un dúplex en calle Monseñor Rösch 3523, departamento “B”.
Alfonzo la tenía retenida contra su voluntad, amenazada, bajo los efectos de sustancias, obligándola a tener relaciones sexuales con hombres por dinero en el departamento y en otros lugares y a ver cómo él mismo tenía relaciones con su novia.
ROUGER.
El ex titular del Copnaf delegación Concordia declaró en la causa por trata de personas con fines de explotación sexual contra una menor de edad, que tiene como imputado al publicista Gustavo Alfonzo. El abogado que actualmente se desempeña en la Municipalidad de Concordia, no estuvo cómodo frente al Tribunal Oral Federal de Paraná. Cuando comenzó su exposición dijo que no conoce a Alfonzo pero unos minutos más tarde, el fiscal José Ignacio Candioti lo dejó en evidencia cuando leyó una serie de mensajes que envió el propio Alfonzo desde la cárcel al teléfono particular del ex coordinador del Copnaf. “¿Me podés hablar Fer?”; “¿Te comunicaste con el Chueco?”; “¿Hablaste con el jefe?”, le preguntó el publicista los primeros días de noviembre de 2015. El funcionario municipal sólo se limitó a decir que efectivamente recibió esos mensajes. Admitió que la pareja de Alfonzo, Yolanda Zárate, lo llamó pero él siempre contestó que estaba “para proteger los derechos de la nena”. Luego de eso, el imputado pidió un careo que finalmente no le concedieron. “Rouger está mintiendo, yo lo llamé desde la cárcel para que pare esta mentira”, aseguró Alfonzo. Este jueves hubo además otros 11 testimonios entre los que resaltó el de la monja Martha Pelloni. Por otro lado, Gustavo Alfonzo amplió su indagatoria. Visiblemente exaltado, el publicista desmintió a la víctima, a su madre, a la monja, a Fernando Rouger, desligó a políticos de la causa y apuntó contra el abogado querellante, Daniel Cedro.
Fuente: Página Judicial y Análisis Digital.
Foto: Silvina Calveyra.