La obra del Centro de Convenciones de Paraná está en su etapa final, y en las próximas semanas será inaugurado.

El gobernador Gustavo Bordet dijo que se está atravesando la última etapa de esta obra «que está quedando magnífica, un centro de convenciones que va a posicionar a Entre Ríos a la vanguardia de lo que es turismo de reuniones, negocios y eventos, habida cuenta que ya contamos con el de Concordia. Este de Paraná será el más grande de la Mesopotamia, con una capacidad para 2.700 personas y que se integra con La Vieja Usina. Será todo un complejo de convenciones que para la ciudad significará un aporte importante en lo que respecta a ingresos turísticos».

Luego indicó que este fin de semana largo la provincia vio colmada la capacidad hotelera, «esto nos abre una muy buena perspectiva para trabajar no sólo el turismo de termas y playas sino también el de reuniones, eventos y negocios. En Paraná, que tiene buena oferta de hotelería, con este centro de convenciones y un aeropuerto internacional, están dadas todas las condiciones para desarrollar distintos eventos que posicionen a la capital de la provincia», sostuvo Bordet.

La obra, que demanda una inversión de 134 millones de pesos, es financiada por el Iapser. La empresa responsable de la construcción es una UTE integrada por Cemyc SRL, Caballi S.A. y Szczech y Szczech. Albergará a 2.700 personas y será el más grande de la Mesopotamia.

Actualmente la obra presenta un nivel de avance cercano al 98 por ciento.
salón principal de la planta alta, instalación de aires acondicionados, pintura y limpieza, culminación de la colocación de luminaria y mobiliario en cocinas y se recepcionó parte del mobiliario (sillas).

El edifico contará con dos plantas y una terraza. En la planta alta habrá un salón con capacidad para 1.800 personas sentadas y que a su vez se podrá dividir en tres pequeños, cada uno con sus correspondientes apoyaturas: escenario, cabina de control de sonido e iluminación, cabina de traducciones, camarines, cocina y sanitarios.

En tanto, en la planta baja habrá oficinas, bar restaurante y un salón de usos múltiples (SUM) con capacidad para 500 personas más y tres salas más chicas destinadas a talleres o reuniones.

El ingreso principal al edificio se encuentra sobre la calle San Martín. Se accede por una rampa o por unas escalinatas adaptadas a la barranca. Sobre esa calle se abrió una calle interna que conecta con La Vieja Usina y que será utilizada para el ascenso y descenso de visitantes, como así también para acceder al estacionamiento que tiene capacidad para 21 vehículos.