El documento que elaboró el plenario de secretarios generales de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), que se reunió en Paraná el jueves 10, planetó el escenario del conflicto salarial en la Provincia y cargó con la mayor responsabilidad en su resolución sobre las espaldas del Gobierno. El Ejecutivo presentó una recomposición salarial para 2022 del 45,45% en cuatro tramos, y reapertura de la negociación en agosto. Fue la tercera propuesta de recomposición: la primera fue el 27 de enero, un 8,9% para recuperar el salario sobre la inflación de 2021, que fue del 50,9%; la segunda fue el 22 de febrero, cuando propuso 45,45% en cuatro etapas; la última, el sábado 26 de febrero, con la misma oferta, en distintos tiempos.

Pero dos sucesivos congresos de Agmer rechazaron la propuesta del Gobierno. El último congreso del sindicato, el 3 de marzo en San Salvador, dispuso además cuatro días de huelga: dos ya se cumplieron; otros dos se cumplirán el miércoles 16 y jueves 17. De momento, no hay diálogo de partes: el Ejecutivo decidió retirar la propuesta luego del desaire docente y anunció descuento de días no trabajados por huelgas. Además, el gobernador Gustavo Bordet dijo que mientras haya conflicto no habrá negociación. El plenario de Agmer del jueves 10 recordó un planteo del secretario general del sindicato, Marcelo Pagani, cuando reclamó: «Es de suma importancia destacar que es necesario recuperar salario, recordando que no hubo paritarias durante el año 2020 … solo hubo incremento por bono, con 36 puntos de inflación de los que ha quedado un desfasaje de 16 puntos, entendiendo que es imprescindible sea parte de la propuesta no solo la equiparación por la inflación real sino la recuperación del salario que se encuentra depreciado no solo por el período pandémico sino que se viene de un gobierno neoliberal con fuerte pérdida del poder adquisitivo del salario”.

Agmer reclamó «urgente» recomposición salarial

 

Agmer había distribuido los simuladores de aquel aumento del 45,45% para ser debatido en las escuelas. Según esos ensayos, la oferta salarial propuesta por el Gobierno y ahora retirada sumama entre $22.928 y 35.853 al sueldo de bolsillo de los docentes, según se estén en la base de la pirámide, el maestro de grado sin antigüedad, o en lo más alto de la carrera, con 24 años en la actividad. En febrero, un maestro de grado sin antigüedad percibió un salario de bolsillo de $50.441; en marzo esa suba será de $61.139; en junio, subirá a $65.215; en agosto, a $69.291; y en septiembre, a $73.369, con un incremento total de $22.928.

Pero ese era el escenario posible sin conflictos. Ahora, todo volvió a fojas cero.

Cuánto suma un maestro con el aumento del 45,45%

 

Víctor Hutt, exintegrante de la comisón del salario de Agmer, sostiene que hoy, en Entre Ríos, el salario testigoes de $38.062, «apenas por encima de la línea de la indigencia, pero ese salario testigo es para docentes que no se enfermen; si se enferman, pasan a tener un salario testigo de $35.094, en la misma línea de la indigencia».

«Es sabido que cuando se habla del salario docente se hace mención al salario mínimo que cobran los docentes que recién se inician, que es de $50.441. Pero ese es un falso salario testigo, porque dentro de sus componentes tiene un monto volátil, llamado adicional para mínimo o podríamos llamarlo subsidio a la pobreza, con un valor de $7.300 de bolsillo, que sólo es percibido por docentes sin antigüedad y se le quita a medida que crece su antigüedad. Por eso el concepto de volátil, no lo cobra nadie, se lo prestan a los salarios más pobres y por otro lado hay dos montos en negro, que suman $5.080, que no son abonados como sueldo provincial, que llegan como un bono del Gobierno nacional pero al no ser considerados sueldo, no tiene tratamiento salarial, desaparece para los jubilados, no aporta a las obras sociales», señala.

Y existe un tercer monto, agrega, el presentismo o productividad, «que sólo lo perciben como premio aquellos docentes que no sufren enfermedades. El castigo por enfermarse para un docente inicial en Entre Ríos es de $ 3.000.

Francisco Nessman, integrante de la conducción de la seccional Federal de Agmer, sostiene su punto de vista: «El rechazo de la oferta salarial del Gobierno tiene sus fuertes fundamentos en datos objetivos que no la hacen para nada atractiva y mucho menos efectiva para los haberes docentes, pese a los intentos mediáticos de la Patronal de vender como muy favorable la misma». Y recuerda que si bien el Gobierno pagó un 8,9% para recuperar salarios frente a la inflación de 2021, olvidó el reclamo de 2020, cuando los docentes «perdieron» 16% frente a la inflación. «Recuperar ese 16% y darle entidad en la oferta del Gobierno es ineludible en la demanda», asevera.

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora