“Si queremos defender la educación pública hagámoslo con racionalidad, y más con un gobierno como el nuestro siempre dispuesto a dialogar”, dijo hoy el gobernador Gustavo Borde, de cara a la protesta de los gremios de los maestros, que en las últimas horas endurecieron sus posturas en el marco del conflicto salarial.

En lo que va del mes de marzo, los docentes de Entre Ríos han llevado a la práctica 10 días de paro, el último el jueves 30. Y han rechazado por “insuficiente” el aumento ofrecido por el Gobierno, de un 18%, en tres fases del 6%, por sobre el piso salarial garantizado hoy de $9.329.
En contrapartida, los gremios reclaman una mejora de entre el 35% y el 40%. Dicen que pretenden “recuperar” la pérdida del poder adquisitivo de 2016, y ponerse a tiro del índice de inflación previsto para 2017. El Gobierno no maneja esos índices, aunque anunció que se sentará a dialogar nuevamente, con otra propuesta.

“Creo que hay que poner una cuota de racionalidad, más aún cuando no hemos cerrado el dialogo y pensamos una nueva propuesta a los docentes”, pidió el gobernador Bordet, tras la decisión de un grupo de docentes de Paraná de tomar el edificio del Consejo General de Educación (CGE), desde el jueves y por tiempo indeterminado.
En medio, la conducción provincial de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) anunció que el lunes instalará una carpa frente a Casa de Gobierno.

Las protestas son en demanda de una nueva oferta salarial, aunque también para rechazar los descuentos salariales aplicados por adhesión a los paros. Este viernes, además y de modo sorpresivo, se dispuso suspender las actividades en las escuelas desde las 10. En ese contexto, ya empezó a hacerse notar el malestar de los padres que para el lunes a las 17, convocaron a una asamblea en Plaza San Miguel para determinar qué hacer ante la seguidilla de medidas de fuerza en las escuelas.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.