El gobierno de Mauricio Macri propuso y autorizó el pago de $ 72 millones al ex presidente y CEO de YPF, Miguel Galuccio, por la compensación de «todas sus funciones y conceptos del CEO», algo que incluye también «el acuerdo por su salida de la compañía». Lo hizo en el marco de la última asamblea de accionistas de la empresa, que se realizó el 29 de abril pasado. La decisión se votó por unanimidad.
La remuneración al ex número uno, que se mantuvo en secreto hasta ahora, figura en el acta de la asamblea de accionistas que se realizó en la sede de la compañía, en Puerto Madero, el 29 de abril. Galuccio dio un paso al costado en la conducción de la empresa, que les cedió a su nuevo presidente, Miguel Gutiérrez, y a Daniel González, actual CFO de la petrolera, que continuará como gerente general interino hasta que YPF defina quién sucederá a Galuccio, según consigna el diario La Nación.
Galuccio llegó a YPF un poco de la mano del exgobernador Sergio Urribarri, quien no evitó la alta exposición cuando tuvo que contar detalles de la intermediación que realizó. “La Presidenta es en exceso generosa en contar públicamente ciertos detalles de la intervención que tuve en el ascenso de Miguel Galuccio a este nombramiento”, dijo.
“A Miguel lo conocía desde hacía tiempo y lo fui a ver especialmente a Londres para que me contara cómo era eso de que la Argentina está entre los tres productores mundiales de petróleo y gas no convencional y qué se podría hacer al respecto. Y me encontré con un ejecutivo de tremendo nivel (el argentino que más alto ha llegado en la industria petrolera a nivel mundial), de relación personal con personalidades mundiales, con conocimiento de la tecnología más moderna, desarrollador de los modelos de negocios más innovadores y de una calidad personal excepcional, como buen entrerriano que es”, contó el viernes 4 de mayo de 2012, a días de que Cristina Fernández de Kirchner oficializara la designación de Galuccio en YPF.
El hermano del gerente de Galuccio, Carlos Galuccio, fue titular de la Unión Industrial de Entre Ríos. Está casado con una de las hijas del fundador de una constructora en la que él trabajó durante toda la vida, llamada Luis Losi S.A. Esa empresa se benefició en los últimos años con contratos millonarios firmados con la administración Urribarri.
Los Galuccio -cuatro hermanos, de los cuales tres son ingenieros- tienen una empresa familiar: El Sembrador, una distribuidora de bebidas.
En marzo de 2014, y luego de entrevistarse en YPF con Galuccio, Urribarri calificó al ex ejecutivo de la petrolera como un «entrerriano al que hemos repatriado».
El repatriado ahora se va con los bolsillos llenos de YPF.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.