Por Víctor Hutt (*)

“Donde haya un alumno debe haber una escuela”. José Luis Panozzo, presidente del Consejo General de Educación (CGE) de Entre Ríos.

En la Provincia de Entre Ríos circulan miles de niños que deberían tener jardines lúdico expresivos de acuerdo al artículo 43° de la Ley Provincial de Educación

Ley Provincial de Educación N° 9.890, en su artículo 43°, fija: «El Consejo General de Educación garantizará en escuelas secundarias de adultos el funcionamiento de jardines maternales con el propósito de asegurar la permanencia y egreso de los alumnos y alumnas».

Históricamente, hemos planteado la necesidad de acompañar a las escuelas de adultos con un jardín maternal para solucionar los problemas generados para los estudiantes con hijos, pero en la actualidad esto está establecido como obligación para el gobierno provincial, simplemente lo tiene que cumplir.

Este incumplimiento del CGE produce daños significativos en varios aspectos de la vida escolar, jóvenes que abandonaron su educación secundaria común por maternidad o paternidad y que no pueden completar sus estudios en escuelas de adultos por no existir los jardines que indica la ley, jóvenes que comienzan sus estudios y en pleno camino los deben abandonar, niños pequeños que circulan por las escuelas de adultos en un ambiente que no es propicio para ellos, docentes, personal y directivos de escuelas de adultos que deben hacerse cargo de niños que circulan por las escuelas, con todos los riesgos que ello implica.

Este año hemos visto a un presidente del CGE muy preocupado por recategorizar escuelas, por perseguir a directivos y docentes con la resolución N° 2.566/16 y hace unos días declarando que “donde haya un alumno debe haber una escuela”, pero sin embargo lo que vemos en nuestras escuelas es una inmensa cantidad de abandonos de estudiante jóvenes y adultos porque ese mismo presidente del CGE nada ha hecho por cumplir con el artículo 43° de la Ley de Educación.

Nos piden retención escolar, como si necesitaran pedirnos, no saben todo lo que hacemos por la retener a nuestros alumnos, no saben cómo nos duele cuando nos dicen que un estudiante no concurrirá más porque no tiene quien le cuide a sus hijos, les pedimos que los traigan, que los cuidamos nosotros y es así como vemos niños dibujando en los escritorios de las aulas o de las oficinas, vemos profesores dando clases con bebés en brazos para que su madre pueda hacer un examen, vemos a profesores que preparan actividades para los estudiantes y también para sus hijos, a todo lo hacemos sin reclamar reconocimiento, lo hacemos porque lo sentimos de esa manera, pero no podemos concebir que por un magro presupuesto necesario no se creen los cargos necesarios para garantizar el derecho establecido en la ley de educación.

En estos días hemos visto que se han realizado recursos de amparo para exigir el cumplimiento del artículo 43° de la Ley de Educación, parece mentira que a ocho años de dictada la ley sea necesario presentar recursos de amparo para que la misma se cumpla.
Es responsabilidad de José Luis Panozzo hacer que la ley se cumpla y esa responsabilidad es compartida por el gobernador Bordet, como también fue de Urribarri, Bar y Valori de gestiones anteriores, ellos son responsables del abandono escolar de miles de jóvenes y adultos en toda la provincia por el incumplimiento de la ley.
La mayoría de esos abandonos son de madres jóvenes que tienen pocos recursos para afrontar su futuro con sus hijos y encuentran que completar el secundario es una forma de adquirir recursos que le faciliten ese duro camino de madres jóvenes, pero la escuela las expulsa, la ley es sabia en su artículo 43°, pero quienes ocupan los cargos con responsabilidad de hacerla cumplir, entienden que miles de abandonos anuales del sistema educativo, son un problema menor que no requiere esfuerzo para solucionarlo.

(*) Rector de la Escuela Secundaria para Adultos N° 12 de Concepción del Uruguay. Secretario de Educación de Adultos de la seccional Uruguay de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer).