La secretaria del médico anestesista puede aparecer en la puerta del quirófano y decir, amablemente, cuánto es lo que hay que pagar en concepto de plus por el acto médico. Puede ser $1.500.
Antes, mucho antes de ingresar al quirófano, cuando el paciente está en el consultorio, frente a su médico, incluso antes de sentarse ahí, ha debido meter la mano al bolsillo para pagar plus también: entre $80 y $150. Y si previo a todo eso debió acudir a un servicio de guardia, el plus es un poco más también.
La práctica del cobro de plus entre los pacientes del Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper), la mayor prestadora de salud, con un universo de casi 300 mil afiliados, “se ha recrudecido”, aceptan desde adentro del organismo.
Los médicos, habiendo firmado acuerdos, se apoyan en supuestos incumplimientos contractuales para aplicar el cobro de plus a los pacientes, cuentan desde el Iosper. “Le dicen al paciente que es porque el Iosper no paga, y no es así”, explican desde el organismo.
Como fuere, el plus médico es otra vez una práctica muy corriente en casi todas las obras sociales.
Desde hace dos años, las obras sociales aguardan que la Legislatura sancione una ley que penalice el cobro de plus a los pacientes, pero todavía no se alcanza unificar criterios. En 2014, 18 obras sociales de Entre Ríos elaboraron un documento conjunto en el que calificaron como una “estafa al afiliado” el cobro de plus por parte de los médicos. El paso siguiente fue presentar el proyecto de legislación en Diputados y Senadores.
Pero diputados y senadores elaboraron proyectos separados, que hoy, cada uno, tiene media sanción.
En Diputados, la iniciativa fue impulsada por el legislador Daniel Ruberto, y el texto obtuvo media sanción el 14 de abril de 2015.
“Prohíbase en todo el territorio de la Provincia la exigencia y/o el cobro de plus a toda persona física o jurídica por los servicios médicos y ramas anexas que brinden a los afiliados que gocen de cobertura médico asistencial otorgadas”, planteó el artículo 1º del proyecto de ley.
Mientras, el 30 de noviembre el Senado dio media sanción al proyecto impulsado por César Melchiori, que también prohíbe el cobro de plus en la provincia, ubica como autoridad de aplicación al Ministerio de Salud y también ordena a las obras sociales a conformar un cuerpo de inspectores que actuarán del mismo modo a lo que plantea el proyecto de Ruberto.
Y el cierre del período legislativo anterior concluyó así: con sendos proyectos, sin posibilidad de unificación.
Ahora, las autoridades del Iosper han empezado una serie de encuentros con legisladores en procura de sancionar una ley antiplus.
El último encuentro fue con el presidente del bloque de senadores del Frente para la Victoria (FPV), Ángel Giano.
En esa reunión, el titular de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), Fabián Peccín, sostuvo que que “el plus es un flagelo que no tiene razón de ser”. Mencionó que cada profesional suscribe un convenio en el que están estipulados los honorarios. Al rechazar la desviación a ese compromiso, mencionó que además el cobro de un monto superior al acordado entre las partes, es una evasión impositiva.
Pero tanto Giano como el titular del bloque de Cambiemos, Raymundo Kisser, coincidieron en apoyar el espíritu de la norma aunque revelaron que aún no ha sido analizado en comisión por la actual composición legislativa asumida en diciembre de 2015.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.