El SOS empezó a circular en redes sociales. Circula con la urgencia de lo impostergable, que requiere solución ahora mismo. “Soy Silvina y soy paciente oncológica”, dice el anuncio, sobre un fondo rojo: “En este momento mi obra social (UTA) se encuentra embargada en sus cuentas y se le ha presentado un recurso de amparo por no cumplir con la entrega de medicación necesaria para continuar mi tratamiento”.

Silvina Zanetti, de ella se trata, dice también: “Los tiempos de ellos no son los míos, por lo que estamos recaudando dinero para comprar Nilgaban Fulvestrant 250 mg, actualmente su costo es de $3.853.964,05 y Piqray alpesilib 150 mg de $8.771.731,95 (farmacia Magna)”.

La obra social de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), el sindicato de los choferes de colectivos, no le responde. “Soy afiliada desde los 11 años y nunca había atravesado una situación así”, cuenta ahora, que se lanzó a una campaña solidaria de recaudación de fondos para adquirir esa medicación que su cuerpo le demanda: no puede esperar, no puede pausar el tratamiento,

Su alias es: silvina.zanetti.

“En este momento estoy con el tratamiento cortado porque no me ha llegado la medicación: básicamente es lo que necesito para poder seguir con esto, es un tratamiento que no se puede cortar y la obra social no me está dando la medicación que necesito. Y no me dan una razón tampoco del porqué. Ellos me dicen que está autorizado pero no me llega. Recibí una dosis en los primeros días de diciembre, me hice las aplicaciones, tomé las pastillas que es por vía oral y ahora la segunda aplicación  para continuar el tratamiento no me ha llegado”, contó Silvina al programa Puro Cuento de Radio Plaza 94.7.

Su cuadro oncológico se lo detectaron en 2020. “Ese año 2020 tuvo que hacerme una cirugía, una reconstrucción mamaria. Pero la obra social sólo me cubría la cirugía, pero no me daban los implantes mamarios. Esa vez tuvimos que ir a la Justicia con un amparo y por medio del amparo ellos respondieron, me dieron todo lo que necesitaba. Luego me hice quimio, hice rayos y continué con medicación vía oral. En julio del año pasado me vuelvo a hacer estudios y sale que la enfermedad avanzó. Entonces, el médico decide cambiar la medicación y es ahí donde ellos ya me empiezan como a dar vueltas. Hice el pedido de medicación, lo pedí en los primeros días de octubre y ellos recién me lo dan el 29 de noviembre por ahí. Pero para eso tuve que poner un abogado, hubo que hacer otra vez un amparo. Cuando entrego el nuevo recetario ya no me responden”, detalló.

-¿Cuál es el problema de la obra social de UTA?

-Está intervenida y tiene casi todo cortado. La verdad no entiendo mucho, pero en sí lo que sé es que no tenemos consultas médicas, porque está cortado, no tienen convenio con odontología, no tienen convenio con psicología, hay momentos que se corta hasta las internaciones. Creo que sólo tienen acuerdo con el Hospital Militar.  Yo, como paciente oncológica, debería tener todo gratis, pero hasta los análisis me estoy haciendo cargo yo.

-¿Y los medicamentos?

-Es imposible. Para un mes de medicación tendría que poner un año de sueldo de mi trabajo. La medicación me cuesta $12 millones. En realidad, para cualquier persona es imposible pagar de su propio bolsillo esa suma.

-¿Tuviste que ir con un amparo para que te responda la obra social?

-Sí, tuvimos que presentar un amparo. El amparo salió favorable, pero tampoco responden. Entonces, el abogado hizo un embargo. Se hizo lugar en la feria. La obra social me tendría que responder, pero hasta ahora no tengo ninguna novedad. No sé si no tendrán plata, no habrá fondos en el banco, o cuál es el problema.

-Entonces iniciaste la colecta.

-Hicimos un flyer donde pedíamos la medicación primero: por ahí hay mucha gente que cambia de tratamiento, les sobra la mediación, y se forman bancos de remedios. Pero ese en el caso de las pastillas; no pasa lo mismo con los inyectables, porque eso es algo que te llega y te lo aplicas. Es muy difícil que alguien lo tenga, y eso es lo que me está costando más conseguir. Por eso, terminando haciendo una colecta, porque es la única manera de poder llegar a conseguir alguna de las medicaciones. Al menos para este mes, y poder continuar con el tratamiento un mes más, y después veremos. Pero la verdad que no sé cómo vamos a seguir.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora