La Iglesia de Paraná optó por el camino menos amable para hacer notar su indiferencia respecto de la suerte del cura Juan Diego Escobar Gaviria, encarcelado desde el viernes en la Unidad Penal Nº 5 de Victoria: optó por el silencio.

El viernes 21 el juez de Garantías de Nogoyá, Gustavo Acosta, dictó la prisión preventiva por 20 días al cura Juan Diego Escobar Gaviria, con cuatro denuncias penales por abusos a menores, hechos que habrían ocurrido mientras fue párroco de San Lucas Evangelista, de Lucas González, entre 2005 y finales de octubre de 2016.

La resolución del magistrado fue luego de un pedido en ese sentido formulado por el abogado querellante, Mariano Navaro, que representa a tres de las cuatro víctimas que denunciaron al cura, pedido al que adhirieron el fiscal Federico Uriburu y el defensor oficial Oscar Rossi.

Navarro solicitó una preventiva por 60 días, en tanto que el fiscal Uriburu reclamó que se le aplicara la incomunicación al cura. Pero el juez Gustavo Acosta, titular del Juzgado de Garantías de Nogoyá, sólo accedió a una prisión preventiva de 20 días, aunque manteniendo la comunicación del sacerdote.

En su resolución, el juez Acosta ordenó “la prisión preventiva del imputado Juan Diego Escobar Gaviria (…) por el término de veinte días (…) quedando el mismo alojado en dependencias de la Unidad Penal Nº 5 de la ciudad de Victoria, en calidad de comunicado, en orden a los delitos Corrupción Agravada de menores en concurso real con Abuso Sexual”.

Conocida la decisión del magistrado, los defensores de Escobar Gaviria, Juan Pablo Temón y Milton Urrutia fueron en apelación al Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguaychú. El domingo, en un día inusual, la Justicia del sur de Entre Ríos abrió sus puertas y trató ese recurso, aunque finalmente el camarista Arturo Exequiel Dumón terminó confirmando la preventiva del sacerdote.

Ni entonces, cuando se dictó la preventiva en Nogoyá, ni después, cuando un tribunal de alzada de Gualeguaychú confirmó la medida, hubo pronunciamiento eclesiástico. La Iglesia prefirió desentenderse de uno de los suyos.

Escobar Gaviria es uno de los tres miembros del clero paranaense investigados en la Justicia por abusos a menores. Los otros dos son Justo José Ilarraz y Marcelino Ricardo Moya.

Escobar Gaviria es un cura que pertenece a la Cruzada del Espíritu Santo, la orden religiosa que tiene como máximo lider al sacerdote Ignacio Peries, de la Parroquia Natividad del Señor, de Rosario, la comunidad que aloja al arzbosipo emérito de Paraná, Mario Luis Bautista Maulión.

De momento, la única manifestación oficial de la curia sobre el caso Escobar Gaviria fue el comunicado oficial que se dio a conocer el 31 de octubre de 2016, cuando el escándalo estalló públicamente.

Pero nada más.

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.