Mientras aguarda conocer los fundamentos de la sentencia que lo condenó a 25 años de prisión –se darán a conocer el jueves 14–, el cura Juan Diego Escobar Gaviria ya fue notificado de que hay una nueva causa en su contra por el supuesto delito de corrupción agravada de menores.
La investigación penal preparatoria está en manos del fiscal Federico Uriburu, de la Unidad Fiscal de Nogoyá, y se relaciona con la denuncia que efectuó el sábado 19 de agosto, en Lucas González, el joven S, de 17 años. «Pasaba una semana y me empezaba a llamar por teléfono, me pedía disculpas, me escribía por whatsapp, me decia que me quería mucho, que le hacía mucha falta, que no me aleje de Dios», contó S. respecto del acoso que soportaba de parte del párroco de Lucas González.
El cura ya fue condenado el miércoles 6 de septiembre a 25 años de prisión por el Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguay, al hallarlo responsable del delito de corrupción y abuso sexual de menores en cuatro hechos, cuya denuncia empezó el viernes 28 de octubre de 2016. La primera presentación judicial fue hecha por dos monjas del Colegio Castro Barros San José, de Lucas González. Esa denuncia derivó en el apartamiento de Escobar Gaviria del servicio activo en la Iglesia, medida que adoptó el arzobispo Juan Alberto Puiggari.
Escobar Gaviria se enteró de la nueva denuncia en la prisión. Desde el 21 de abril está alojado en la Unidad Penal de Victoria con prisión preventiva. La medida, pedida por el querellante Mariano Navarro y el fiscal Uriburu, se dispuso para evitar un entorpecimiento en la investigación y para que no haya presiones a víctimas y testigos. En la sentencia a prisión, el Tribunal de Gualeguay confirmó la prisión preventiva y su sostenimiento hasta que el fallo quede firme. El principal riesgo que arguyeron los jueces María Angélica Pivas, Darío Crespo y Javier Cadenas es el de «fuga» por parte del sacerdote.
Ahora, una nueva investigación se cierne sobre el cura, y otra vez quedará contra las cuerdas: el nuevo testimonio reforzó la acusación que expusieron los fiscales Uriburu y Darío Tórtul en los alegatos del lunes 28 de agosto, pero además tiene su propio peso para sostener una nueva acusación. Será, en definitiva, otro ladrillo en la pared. Y que sumará más cargos contra el cura que durante casi 15 años fue personaje clave en la vida de Lucas González.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.