«El Jardín no está; el CGE sigue sin cumplir con la obligación que le marca la Ley de Educación, pero los niños y niñas están en la ESA 12 y son nuestra prioridad, nos hacemos cargo».

De ese modo, los docentes de la Escuela Secundaria para Adultos N° 12 «25 de Junio», de Concepción del Uruguay, decidió iniciar una campaña de recolección de jueguetes para poder contener a los niños mientras sus madres y padres asisten a clase en horario nocturno.

El Consejo General de Educación (CGE), según manda la Ley de Educación, debe garantizar jardines maternales para que los hijos de padres o de madres alumnos puedan dar clase mientras sus niños están contenidos en la escuela a la que ellos asisten. En efecto, la Ley de Educación establece:

“Artículo 43°: El Consejo General de Educación garantizará en escuelas secundarias de adultos el funcionamiento de jardines maternales con el propósito de asegurar la permanecía y egreso de los alumnos y alumnas».

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La ley, sin embargo, no se cumple en ese punto, y los alumnos y alumnas con hijos deben arreglárselas como pueden para ir a  clase; en ocasiones, abandonan el sistema; en otras, se impone el voluntarismo de los docentes, que, mientras enseñan, cuidan niños.

El tema ha llegado a la Justicia, y aunque en primera instancia ha encontrado cabida, luego el Superior Tribunal de Justicia (STJ) ha dado vuelta el fallo.

El profe que da clase con un bebé en brazos

 

En marzo de 2017, la Sala Penal del STJ revocó la sentencia del exjuez de Familia Nº 1, Tulio Rodríguez Signes, que había obligado al Estado a disponer jardines maternales en las escuelas secundarias nocturnas para que las alumnas mamá puedan estudiar y a la vez dejar a sus hijos en un sitio donde estén contenidos.

A esa resolución del máximo órgano judicial provincial se llegó tras la apelación del Consejo General de Educación (CGE), que pidió revocar la sentencia de Signes por considerar que el amparo no era la vía idónea para el reclamo. El fallo revocatorio que le dio la razón al CGE fue dictado por los vocales Eduardo Carbó y Marcela Davite, mientras que Bernardo Ignacio Salduna se abstuvo de votar.

El profesor que dio clase con el bebé de una alumna en brazos

 

El fallo del juez Rodríguez Signes fue dictado el 1° de diciembre de 2016, haciendo lugar a un recurso de amparo presentado por un grupo de 21 alumnos de ocho escuelas nocturnas, cuya causa se caratuló “Godoy Gisela Elena y Otros c/Consejo General de Educación s/Acción de Amparo”. En esa sentencia, que ahora fue revocada, el magistrado había ordenado a Educación “dar efectivo cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 43° de la Ley 9.890 y en los artículos 128/134 de la resolución N° 3.945 con la modificación introducida al artículo 128 por Resolución N° 4.148”.


En ese contexto, y con falta de jardines maternales para los hijos de los alumnos, en la Escuela Secundaria para Adultos N° 12 han resuelto iniciar una campaña de recolección de juguetes para así los propios docentes y auxiliares de educación encargarse del cuidado de los niños.

“Nuestros niños se aburren. Son niños y si se aburren tironean a mamá a volver a casa y así comienza el abandono de nuestras mamiestudiantes. Tratamos de proponerles juegos para entretenerlos pero necesitamos juguetes, juegos didácticos, juegos que puedan entretenerlos sin peligros, no hace falta que sean nuevos pero sí que estén en buenas condiciones”, dice la convocatoria.

Y agrega: “Si tenés juegos en tu casa que ya no utilizás, acercalo a nuestra escuela, que es una escuela de Jóvenes y Adultos, pero repleta de niños y niñas de los que nos hacemos cargo para que sus mamis puedan estudiar”.

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora