El peronista Roque Ramón Ferrari fue elegido como el nuevo jefe de la bancada de Cambiemos en la Cámara de Senadores de Entre Ríos. Así lo formalizó quien hasta hoy tenía la jefatura del bloque, el radical Raymundo Kisser. A diferencia de lo que sucedió en la Cámara de Diputados, donde el radicalismo retuvo la dirección del bloque, en la figura de Sergio Kneeteman, en la Cámara Alta hubo un recambio que suscitó la atención de todos.
Si bien el senador por Paraná, Raymundo Kisser, había confirmado este martes que dejaba su lugar al peronista Ferrari, este último esperó hasta poco antes de la sesión preparatoria del 138 período legislativo, para confirmar a la prensa de su nueva responsabilidad al frente del bloque de Cambiemos. Hasta minutos antes del anuncio de Kisser en el recinto, Ferrari habló de su designación en términos de posibilidad.
En diálogo con Entre Ríos Ahora, el senador victoriense de 63 años dijo que apuesta a continuar el trabajo que el bloque venía desarrollando bajo el mando de Kisser, y abogó por afianzar la unidad de la fuerza en la Cámara Alta. “Los proyectos que podemos presentar en el bloque son todos consensuados; así ha sido en el año anterior. Espero que esta metodología la sigamos manteniendo y afiancemos esta unidad de bloque que ha sido importante”, dijo Ferrari a Entre Ríos Ahora.
En cuanto al frustrado juicio político a Carlos Chiara Díaz, exjuez del Superior Tribunal de Justicia (STJ), valoró el proceso que llegó a su fin este miércoles con la declaración en abstracto de la causa, que devino tras la renuncia presentada el pasado 7 de febrero al gobernador Gustavo Bordet.
Ferrari consideró como “muy importante” el proceso y resaltó que de ahora en más la Justicia deberá “cuidarse de no extralimitarse” en sus funciones. “Me parece muy importante que se haya hecho este juicio político, independientemente del resultado que se hubiere logrado. Lo confirman las declaraciones del propio vicepresidente del STJ, Bernardo Salduna, que dijo que no va a firmar más viáticos si no se dan los argumentos necesarios. Esto marca un antes y un después. Ahora los funcionarios del Poder Judicial, llámese empleados o jueces, saben que el día de mañana pueden ser juzgados como cualquier hijo de vecino”, señaló el dirigente peronista en Cambiemos.
Consultado sobre si está de acuerdo en que la integración del STJ, compuesta por nueve jueces, sea reducida a siete, Ferrari se mostró a favor de un STJ de cinco miembros y de eliminar la división por Salas, a saber: Sala Nº1 de Procedimientos Constitucionales y Penales, que presidía Chiara Díaz; Sala Nº2 en lo Civil y Comercial; y la Sala Nº3 del Trabajo.
“Lo hemos planteado en la Comisión de Asuntos Constitucionales cuando hubo esta denuncia contra Chiara Díaz, planteamos que no solamente se baje a 7 sino que se baje a 5, e incluso que se eliminen las Salas porque me parece que eso haría muy bien al servicio de justicia. La idea sería volver a 5, pero si el gobernador estima que sean 7, me parece que es una mejora interesante”, sostuvo el senador por el departamento Victoria.
En cuanto a la eliminación de las Salas, argumentó que ello “le daría participación a los 5 integrante o 7 que haya para que todos actúen en todas las causas. Porque si no, ahora tenés que esperar que caigan en la Sala y el juez de la Sala sea el que resuelva. En este caso todos estarían en condiciones de resolver”.
ORÍGENES.
El flamante jefe del bloque de Cambiemos, reseñó su historia personal en la política. Contó que es jubilado de la Municipalidad de Victoria, donde cumplió diferentes funciones a lo largo de su trayectoria: “entré como jornalizado y terminé siendo Secretario, Asesor letrado del municipio, Tesorero, Contador. Incluso Secretario de Gobierno y Hacienda”, contó.
Ferrari también relató que es abogado y se jacta de haber hecho la “carrera libre y de grande” en la Universidad Nacional del Litoral. Según dijo, ingresó pasados los 30 años a la academia: primero se recibió de Procurador, y luego concluyó la carrera de Abogacía.
Al ser preguntado sobre su referente político en la provincia, el senador peronista mencionó sólo uno: el tres veces ex gobernador Jorge Busti. “Trabajé mucho con Jorge Busti, en las distintas campañas, así que con él he tenido un muy buen diálogo y lo respeto como un gran dirigente”, afirmó.
En cuando a los dirigentes con los que se referencia a nivel nacional, dijo no tener uno en particular sino que ha seguido “a todos aquellos que de alguna manera me han podido cultivar”. “En líneas generales yo creo en la política racional, en la persona que piensa en el bien común, en el interés general”, indicó.
Preguntado sobre los peronistas que lo cuestionan por ser parte de Cambiemos, Ferrari dijo que “habría que ver si ese peronista se fue del seno del partido, porque en realidad no son poco los peronistas que a veces salen para trabajar de otra manera porque no se sienten contenidos o no le gustan algunas políticas que algunos dirigentes que se hacen dueños de los símbolos, de las políticas del justicialismo”.
“Esa discusión se va a dar muchas veces dentro del peronismo y cada uno es dueño de enojarse o no enojarse. Algunos no solamente se enojan con los que están fuera sino con los que están dentro”, acotó.
Tras ello, mencionó que su desacuerdo con los gobiernos kirchneristas lo llevaron a trabajar en Cambiemos: “Los actos de corrupción llevados a cabo por el kirchnerismo no me gustaron para nada. Esa fue una de las cuestiones por la cual trabajé en el espacio Cambiemos, para que definitivamente esas cosas no ocurrieran más. No por casualidad gana (Mauricio) Macri en la Nación, porque la sociedad estaba cansada y harta de esas políticas totalmente corruptas”. En ese marco, Ferrari consideró que actualmente “la sociedad le está dando un hándicap al Gobierno nacional porque no quiere volver atrás”.
En cuanto a la provincia, hizo mención a las investigaciones judiciales que pesan sobre el ex gobernador y presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Urribarri, y otros dirigentes como el caso del diputado José Allende (FpV) y Juan José Canosa, ex titular de la tarjeta Sidecreer. En esa lista también incluyó al ex juez supremo, Chiara Díaz.
“Acá estamos viendo lo que está pasando con el ex gobernador, el diputado provincial Allende, con la gente de Sidecreer. Chiara Diaz durante 12 años estuvo en el gobierno kirchnerista como vocal y pareciera que nunca se dieron cuenta que esta situación existía. Creo que lo malo que antes se veía como bueno, hoy se lo ve como malo. En realidad era malo antes también, lo que pasa es que habrá existido cierta connivencia entre distintos sectores”, concluyó.
Gonzalo Núñez
Especial para Entre Ríos Ahora.