Juan Martín Masutti cursó la primaria en la Escuela Privada Nº 26 Manuel Dorrego, de Villa Urquiza.
Juan Martín cursó en un proceso de integración, pero la escuela tardó en entregarle el boletín y el certificado de haber concluido 6º grado.
Juan Martín empezó este año a cursar la secundaria en una escuela estatal pero había una deuda pendiente: no contaba con el certificado de haber concluido sus estudios primarios.
Walter Galarza, director de Educación Privada del Consejo General de Educación (CGE), dijo que ocurrió un desentendimiento respecto de los proceso de integración y de aprobación de los estudios primarios. “Pero se charló con el equipo directivo de la escuela, con los supervisores y se llegó a una solución”, explicó.
Ahora, Juan Martín tiene su certificado de escolaridad.
Lo recibió de manos del presidente del Consejo de Educación, José Luis Panozzo. Ahora ya tiene su certificado de estudios primarios que completó en la Escuela N°15 Manuel Dorrego de Villa Urquiza y podrá con ello dar continuidad a su educación secundaria.

“Nunca estuvo en discusión la posibilidad de certificar sus estudios y si bien se deben admitir demoras, que provocaron incertidumbre en su familia, éstas se suscitaron en una detenida evaluación de su trayectoria, sus años de escolaridad y otros detalles propios del abordaje de un caso poco usual”, explicó el titular del CGE.

Panozzo indicó que “una evaluación seria de sus antecedentes es lo que nos permite garantizarle una continuidad exitosa de su carrera escolar, que en definitiva es la finalidad misma del reconocimiento actual y su derecho a la educación”.
El funcionario aseguró que decidió entregar la certificación personalmente “como un modo de subsanar la demora en que se incurrió”.

También evaluó como “positiva” la preocupación expresada días antes por la mamá de Juan Martín, “porque ello presume que nuestra decisión de reconocer derechos y llevar el reconocimiento a la práctica, en casos de chicos que padecen discapacidades, cuenta con el compromiso y apoyo de quienes deben impulsarlos al mejor esfuerzo para superarse en lo educativo e integrarse socialmente”.

“Nuestra comprensión y convicción política en lo educativo estuvo siempre orientada hacia la inclusión, contemplando cada caso en su contexto y con sus particularidades. Pero ello no presume que la simple emisión de un certificado otorgue tales garantías, es en los casos especiales donde debemos poner mayor cuidado para provocar con ello el mejor resultado posible”, aseguró Panozzo.