Recorrer la ciudad con ojo atento permite descubrir postales que resultan impactantes. Algunas por su belleza, otras por su ingenio, algunas más por su descuido. En San Martín e Ituzaingó, pegado a lo que alguna vez fueron las vías del Ferrocarril -ahora allí hay un complejo de departamentos que convive malamente con el paisaje ferroviario que ya no-, hay un cartel escrito en un pedazo de chapa acanalada, pegado a un tronco de un árbol que pasó a mejor vida. Alguien escribió con caligrafía prolija: «Parada de taxi». No se ven taxis en la zona. No hay parada de taxi. Pero el cartel de chapa está ahí.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora