El estado de «emergencia prestacional» que declaró el 26 de septiembre de 2019 el Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper) hasta el 31 de diciembre no fue renovado por lo cual el organismo volvió a transitar por los carriles corrientes en la relación con sus prestadores.

La medida supuso, entre otras consecuencias, “mantener la política arancelaria dispuesta” por Iosper, lo que supone que mientras dure la emergencia no habrá aumentos para los prestadores. Clínicas y profesionales médicos, además, deberán “abstenerse de indicar derivaciones fuera de la Provincia de Entre Ríos, salvo y en el único y excepcional caso que la práctica sea urgente y la misma no se pueda realizar en el territorio provincial por falta de prestador. Esto último con estricta indicación médica y auditoría en terreno por parte del Instituto”.

La primera señal de salida de la emergencia fue la decisión de Iosper de aplicar la última semana un aumento del 12% en los aranceles a todos sus prestadores. Lo confirma a Entre Ríos Ahora el gerente de Administración de Iosper, Arnoldo Schmidt. «La emergencia nos sirvió para dar prioridades, garantizar las prestaciones básicas de salud, es decir destinar los escasos recursos a medicamentos, internación, médicos, anestesistas, bioquímicos y las prótesis. Pero no significó que hayamos dejado de pagar otras prestaciones, o que recortamos prestaciones: en absoluto. Todo el resto se siguió pagando. Pero sí se controlaron mucho más lo que son las derivaciones cuando una prestación podía hacerse en la provincia», señaló.

Schmidt asevera que «lo importante es no cortar la cadena de pago», y que luego de la emergencia, «seguimos trabajando como siempre, administrando los recursos, que son escasos. En realidad, eran escasos antes de la emergencia prestacional, lo fueron mientras duró la emergencia, y siguen siendo escasos. Nosotros tenemos lamentablemente dos variables que son externas a la obra social: el precio del dólar, que afecta el costo de medicamentos y prótesis, y la inflación. Aumenta el dólar, aumenta la inflación, y los recursos siguen siendo los mismos. Los recursos de Iosper aumentan sólo cuando hay aumento de sueldos en el Estado».

La obra social provincial, que para 2020 proyecta un presupuesto de $ 7.977 millones -un 88% destinado a pago de prestaciones- tiene un promedio de aporte de 6,39%: un afiliado activo aporta un 3% de su salario, y otro 4% realiza el Estado; en tanto que los pasivos, aportan el 4% de su salario, y el Estado, el 2%, en vez del 4% histórico.

La emergencia prestacional fue dictada a través de la resolución N° 1.862. Mediante esa medida, el Iosper resolvió “suspender el ingreso de nuevas solicitudes de prestaciones de maestras orientadoras integradoras, como asimismo todo otro emolumento que se estuviere realizando y que no se corresponda estrictamente con una prestación de salud. Suspender todo reconocimiento prestacional que no sea estrictamente para la atención de la salud, como ser aquellos destinados a prácticas deportivas o actividades recreativas que no conlleven rehabilitación, quedando relevado el Instituto de brindar dichas coberturas”.

A través de la emergencia prestacional,  Iosper dispuso que dará prioridad al cumplimiento de «las prestaciones en que se encuentre en riesgo la vida de los afiliados”. También, que priorizará “el suministro de medicamentos prescriptos según su nombre genérico, sin mención de marca comercial y medicina basada en la evidencia”.

“El suministro de prótesis –planteó el texto de la resolución N° 1.852- se efectuará atendiendo las normas de compra vigentes. Cualquier objeción respecto de la calidad de las mismas de las adjudicaciones deberán ser por escrito por el profesional que prescribe y serán puestas en conocimiento de los laboratorios fabricantes de las mismas”.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora