La Escuela Nº103 Ceibos Floridos, ubicada en Las Cuevas, departamento Diamante, fundada en 1968, fue la primera escuela de gestión privada en una zona de islas. En el paisaje natural de la isla La Vascongada, la escuela surgió el 25 de mayo de 1968, gracias a la labor de la Congregación Misionera Siervas del Espíritu Santo. «Ceibos Floridos es un ejemplo de cómo la educación puede ser una causa común sostenida por la fe, la solidaridad y la vocación», expresó la presidenta del Consejo General de Educación (CGE), Alicia Fregonese. La iniciativa partió de Isidoro Ríos, conocido como Don Chololo, quien elevó a las Hermanas Misioneras Myrian Heit y Felisa Keiner la necesidad urgente de una escuela para los 37 chicos en edad escolar que vivían en la isla y no estaban alfabetizados. Con el impulso y el trabajo de la comunidad religiosa, las donaciones solidarias y el respaldo institucional del CGE, se fundó la primera escuela en una zona de islas, que adoptó el nombre Ceibos Floridos por los árboles que adornaban el lugar donde se construyó. La obra fue llevada a cabo por dos hijos de Don Chololo, quienes construyeron un aula y una habitación para el maestro. A pesar de los recursos limitados, la escuela logró expandir su misión y ser el motor educativo de la región. Su impacto permitió el nacimiento de otras escuelas isleñas como la Nº 38 Irupé, la Nº 37 Los Zorzales, la Nº 100 Las Golondrinas y la Nº 54 Las Cañas. La hermana Clara Ester Rosckopf se sumó en 1972 y, junto con las hermanas y las docentes, organizaron la separación de grados y buscaron alternativas para los estudiantes que no podían asistir diariamente debido a las inundaciones. En este contexto nació el Hogar Nuestra Señora de los Pobres que albergó varias generaciones de niños y adolescentes. Con el tiempo, las crecientes del río obligaron a las familias a mudarse a tierra firme, y muchos de los estudiantes de las otras islas se trasladaron a la Escuela Nº 103. Fue una época de enorme sacrificio, Hermanas Misioneras, docentes, familias y vecinos trabajaron juntos para sostener el funcionamiento de la escuela; que luego tuvo su edificio definitivo, frente al arroyo Los Novillos. Actualmente, a más de cinco décadas de su fundación, la Escuela Nº103 continúa con su misión educativa, alberga dentro del mismo complejo al Jardín de Infantes Los Zorzalitos y a la Escuela Secundaria D-197 Ceibos Floridos.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora