Luego de casi cinco años de investigación, la Justicia de La Paz sobreseyó a uno de los ocho policías acusados de haber tenido una participación en el caso del joven que resultó con quemaduras graves cuando estaba detenido en un calabozo de la Jefatura Departamental La Paz de Policía -ubicada a 163 kilómetros de Paraná-. El uniformado sobreseído es Esteban José Marcciani, de 40 años, oriundo de Nogoyá.

El grave hecho ocurrió la madrugada del domingo 16 de abril de 2017 y la víctima fue Eduardo Godoy, que por entonces tenía 22 años. El joven había sido arrestado esa noche en inmediaciones del barrio Feria de La Paz, por infringir los artículos 41º y 43º de la Ley Provincial N° 3815, de Contravenciones policiales, que refiere a infracciones por disturbios en la vía pública.

La investigación penal, a cargo del fiscal Santiago Alfieri, apuntó en una primera instancia a ocho policías: Ruffino Miguel Adrián Arredondo, Pablo Roberto Emanuel Vargas, Neri Ubaldo López, Ariel Ramón Gregoraschuk, Juan Samuel Maidana, Pablo Hernán Silvetti, Betiana Anahí Villalba y Esteban José Marcciani.

Sin embargo, este jueves Entre Ríos Ahora supo que Marcciani consiguió el sobreseimiento a raíz de una presentación realizada por sus abogados Damian Petenatti e Iván Vernengo, la cual fue acompañada por el fiscal Alfieri. En la misma, las partes concluyen que el uniformado no tuvo ninguna participación en el hecho.

En el pedido de sobreseimiento presentado ante el juez de Garantías y Trancisión de La Paz, Walter Carballo, el fiscal y  los defensores señalaron que «no obran evidencias que sirvan para sostener el efectivo conocimiento de la situación por parte de Marcciani».

Piden entre 3 y 5 años de cárcel para siete policías acusados de quemar a un joven

Y se agregó que «durante el lapso en que la acusación sostiene que Eduardo Emanuel Godoy estaba siendo golpeado y sometido por miembros de la fuerza policial, Esteban Marciani no aparece en los registros fílmicos del edificio de la Jefatura Departamental La Paz, arguyendo oportunamente este que se encontraba descansando dentro de una habitación de la Jefatura, y por tanto sostuvo su absoluto desconocimiento de la situación investigada durante la ocurrencia de los hechos conforme se plantea desde la acusación».

Para respaldar el planteo, se explicó que el oficial Marcciani ingresa al puesto de Guardia en la Jefatura a las 3:48:44 y que el detenido había sido ingresado 34 miuntos antes, a las 3:14:34. De modo que se concluyó que el uniformado no presenció ni la siutación de detención, ni el ingreso a la Jefatura, ni los golpes y vejaciones que se dieron en el patio trasero y celda del edificio.

«Ese desconocimiento de la situación diluye el mérito acusatorio, puesto impide fácticamente que el acusado haya tenido posibilidades de activar su deber e intervenir para impedirlo», agrega la presentación de la Fiscalía y la defensa.

En tal sentido, se agrega que «se encuentra fuera de toda controversia que cuando se incendia el calabozo donde se encontraba alojado Godoy, Marcciani estaba en la Guardia, no pudiendo ver ni apreciar qué había ocurrido allí, perdiendo nuevamente toda posibilidad material de intervenir y por lo tanto de cumplir con la figura penal endilgada».

Tras analizar la presentación, el juez Carballo entendió que el policía Marcciani no participó del hecho y que las pruebas aportadas por las partes le permiten tener el estado de certeza negativa necesaria para dictar el sobreseimiento. «Que sumado a ello, por el principio constitucional del ‘plazo razonable’, el imputado debe ser definitivamente liberado del proceso ya que no puede permanecer ‘sine die’ con una causa abierta en su perjuicio, razón por la cual resulta procedente el dictado de su sobreseimiento por el ilícito incriminado, debiendo librarse los despachos solicitados», agregó el magistrado.

Así las cosas, ahora sólo quedan siete policías acusados a la espera de saber si serán enviados a juicio o no. De momento, la audiencia para discutir la remisión de la causa viene demorada, puesto que se reprogramó entre tres oportunidades: el 1º de diciembre, el 24 de febrero de este año y ayer 2 de marzo.

Un joven quemado en Jefatura y una audiencia en espera

Penas

Cabe recordar que en el auto de remisión a juicio, el fiscal pidió las siguientes penas en expectativa: 5 años de cárcel más inhabilitación especial por el doble de tiempo de la pena para Silvetti, López, Vargas, Maidana y Arredondo; mientras que para Gregoraschuk solicita 3 años y seis meses de prisión; y para Villaba 3 años de cárcel.

A los cinco con mayor pena se les endilga haber golpeado y sometido en el calabozo al joven Godoy, y de haberle quemado su cuerpo tras arrojarle un líquido combustible. Ese punto es cuestionado por los defensores, quienes afirman que fue el propio detenido quien se habría prendido fuego con un encendedor que tenía oculto en sus ropas.

Por otra parte, cabe recodar que esta causa tiene a dos policías que también tienen un proceso pendiente por presuntos apremios ilegales. Se trata de los agentes Vargas y López, quienes fueron sindicados como los autores de la golpiza que recibió un joven de Santa Elena en la Comisaría N° 15, en julio de 2019.

Este último legajo se abrió tras la denuncia de un adolescente de 16 años, quien relató haber sido golpeado brutalmente el sábado 27 de julio de 2019, luego de un entredicho con un uniformado. Aquí también los policías aseguran no haber agredido del muchacho.

 

 

 

Gonzalo Núñez

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.