Diego Lucio Lara, exdiputado provincial, asumió este miércoles como nuevo presidente del Tribunal de Cuentas de Entre Ríos, en un acto presidido por el gobernador Gustavo Bordet.

Se trata del primer titular del organismo de control que llega al cargo luego de haber completado una etapa de selección a cargo del Consejo de la Magistratura.

Entre sus desafíos para esta nueva etapa en el organismo, planteó que trabajará para «contribuir a la calidad de la gestión pública».

Además de Lara, hoy también asumió como vocal la contadora María de los Ángeles Moia; y como Fiscales de Cuenta Nº 1, 2 y 3, los contadores , Nancy Rocío Vinagre, María Cristina Federik y Fernando Roberto Lenardón, respectivamente.

En su primer discurso como titular del Tribunal de Cuentas, Lara destacó que se haya cumplido con la Constitución Provincial, reformada en 2008, que establece que los funcionarios del organismo deben ser designados previo concurso publico de antecedentes y oposición.

«En todos estos años, cuando me tocó ser legislador, muchas veces debatimos y sancionamos algunos textos legislativos que tenían que ver con la reglamentación de los nuevos institutos. Algunos son materia pendiente, pero se pudo avanzar mucho. Y uno de esos avances es los que nos convoca. En 2016, el gobernador envió el proyecto a la Legislatura para regular el proceso de selección de las autoridades del Tribunal de Cuenta. Nunca pensé que me iba a tocar ser parte de ese proceso de selección», señaló.

Luego agregó que «no fue una decisión fácil» puesto que «tuve que tomar una determinación en mi vida personal: dejar de lado lo que siempre hice para hacerlo desde otro lugar, a partir del máximo órgano de control externo del gasto publico del Estado».

Enseguida, planteó que trabajará con vocación de servicio y que su desempeño estará enmarcado en el apego al cumplimiento de la Ley, bajo una conducción con criterios objetivos, independientes y profesionalizados.

En cuanto a los desafíos en esta nueva etapa, resaltó: «Hay un gran desafío por delante el Tribunal de Cuentas, que tiene una enorme gravitación en el funcionamiento del Estado provincial: éste hace que funcione correctamente y tiene el cometido de responder a las demandas sociales, que requiere que los controles funcionen correctamente. Ese es nuestro desafío».

«Necesitamos un Tribunal de Cuentas que tenga una mirada para contribuir a la calidad de la gestión pública. Habrá que trabajar en modernizarlo, en nuevas técnicas de control para ser un organismo más eficaz y que ayude a la transparencia en la gestión pública», completó.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.