“Dios nos está iluminando”, dijo Mauricio Macri este lunes en Paraná, al pie al monumento a Urquiza, bajo un cielo plomizo, arropado por un viento helado. Su llegada a la capital entrerriana marcó un punto más en su peregrinaje del #SíSePuede, una estrategia electoral que busca una remontada este domingo 27, tras el duro revés que sufrió en las primarias del 11 de agosto, cuando el candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, marcó una importante diferencia. El periplo arrancó el 28 de septiembre en las Barrancas de Belgrano y concluirá el sábado 19, en el Obelisco.
Casi una hora y media después de lo anunciado, Macri llegó a la zona del Parque Urquiza en helicóptero e ingresó al lugar del acto a las 18,20. Vino a bordo de una combi, acompañado, entre otros, por el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. Ingresó por calle Enrique Berduc y la gente le pidió que se bajara y saludara. Eso hizo.
Desde el palco, la espera había empezado minutos antes de las 17. El titular del Sistema Federal de Medios Públicos, Hernán Lombardi, fue el único que se ocupó de alentar a los seguidores de Macri: cantó, vociferó, bailó y acompañó los pegadizos estribillos que acompañaron el aguante con un jingle a modo de latiguillo: “Hay gato para rato”. Los detractores de Macri lo rotularon en las redes como #MacriGato, y el Presidente les hizo un guiño casi al final de su discurso, cuando fue nombrando una a una las ciudades presentes en el acto: “El Gato vino también”, dijo.
El senador nacional Alfredo de Ángeli, que habló con un tono fronterizo con la reprimenda, dijo que este lunes sería un “día histórico”, y, en un guiño para la interna de Cambiemos, aseguró: “Al que no quiso venir, lo vamos a disculpar”. Uno de los que no estuvo fue el intendente Sergio Varisco –está reponiéndose de una cirugía-; tampoco alguien de su gabinete. Confiado en la levantada que protagonizará Macri en las generales del domingo 27, De Angeli apeló al discurso de púlpito: “Como que hay justicia divina, Macri va a volver a ser presidente de nuevo”.
“Les agradezco que estén acá, defendiendo sus convicciones. Ustedes me inspiran, me dan fuerza”, dijo Macri en un tono coloquial, con una dosis de autoayuda, como ha virado su discurso previo a las generales del 27. “Hoy estoy acá para decirles que ustedes no están solos. Miren todos los que somos, y cada día somos más, más los que no nos resignamos, los que creemos en lo que estamos haciendo, más los que nos unen muchas cosas. Nos une querer cuidar nuestra democracia, vivir en paz, nos une la honestidad, nos une amar y querer vivir en libertad, nos une respetar al otro, nos une querer construir y no destruir, nos une nunca bajar los brazos y nos une el no a la impunidad”, subrayó.
“No tengamos miedo porque siempre los voy a defender, porque creemos en estos valores, y este es nuestro país. Hace cuatro años, en 2015, decidimos jugarnos por el cambio, decidimos decir basta a la resignación, dejar de ser parte del problema para ser parte de la solución”, destacó. “Tenemos que estar orgullosos de todas las cosas que hemos logrado cambiar, que son muchas. Pero también reconocemos que nos faltan muchas más. Y soy el primero en saber que no son tiempos fáciles, que la carga es mucha, especialmente desde abril del año pasado, con la conjunción de una sequía y la pérdida de crédito en la región”, aceptó.
En vivo desde Paraná: La Marcha del #SíSePuede https://t.co/eBvQamcr0b
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) October 14, 2019
En ese tono, Macri reconoció que el peso de la crisis “ha recaído sobre ustedes, la clase media. El fin de mes se ha convertido para muchos en una pesadilla agobiante y angustiante. Y sé que muchos no nos acompañan hoy acá porque están enojados. Pero quiero decirles que los escuché, que los entendí, lo comprendí, y que de ahora en más el foco va a estar puesto en el alivio de todos ustedes”.
En procura de conseguir su reelección, el Presidente aseguró en Paraná que “ahora viene el crecimiento, la creación de empleo, la mejora del salario. Lo que hemos hecho no ha sido en vano. Hemos construido las bases, y las bases más los consensos que plantee anoche (en el debate presidencia), a partir del 10 de diciembre nos va a permitir salir de la incertidumbre que creó el resultado de las PASO, una incertidumbre que trajo miedo al mundo. El mundo no cree que los argentinos podamos volver atrás. Y nosotros queremos decirle que el 27 de octubre no volvemos atrás”.
Fue entonces que enumeró los logros de su gobierno relacionados con la región –el entubamiento del “Antonino”, tropezó y luego se corrigió, “Antoñico”; 4G en el 70% del territorio nacional, las escuelas rurales con Internet, y los emprendedores entrerrianos como José Ayala, que exporta yerba, dijo, aunque cometió un error-, y “los abuelos que tienen celulares”, en un guiño a la intervención de Alberto Fernández en el Debate Presidencial del domingo.
Después, dijo que “cuatro años no son suficientes para arreglar todas las problemáticas que hemos arrastrado en décadas”. Y agregó: “Si pudimos avanzar con la infraestructura, con una revolución en trenes y aviones, en poner freno al narcotráfico, si pudimos comenzar una revolución en la calidad de la educación pública, si pudimos conectarnos con el mundo, cómo no vamos a poder, con tiempo, arreglar la economía. Claro que vamos a poder”.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.