Este lunes se cumplieron 14 días de la ola de calor sostenida que azota a todo el país y que esta vez tuvo un impacto sensible en el sistema educativo entrerriano: el calendario abrió la actividad escolar unos días antes, el 27 de febrero, con el objetivo de las autoridades educativas de cumplir los 190 días efectivos de clase.

Pero las temperaturas extremas, que bordearon los 40 grados, impedirá que ese objetivo se cumpla: desde hace una semana la suspensión de actividades, el acortamiento de jornadas y la libertad de acción a las familias es moneda corriente en las escuelas. El Consejo General de Educación (CGE) decidió dejar hacer en base a la potestad institucional de cada escuela. Así, durante estos días de agobio hubo dictado de clases según las condiciones edilicias y de infraestructura.

Las clases empiezan el 27 de febrero

 

Como fuere, la seccional Tala de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) decidió cumplir, a modo de protesta, asamblea de tres horas por turno este martes en todas las escuelas del departamento. La razón es, dijeron, «la falta de respuesta» de parte del Consejo General de Educación (CGE) a la situación generada en las escuelas por la ola de calor.

Este lunes las autoridades de la Escuela de Educación Técnica Nº 1 Osvaldo Magnasco, de Rosario del Tala, informaron a los padres que «quedará en Uds. la decisión de no enviar sus hijos a la escuela o retirarlos antes, en ambas circunstancias no se computará inasistencia». La misma determinación adoptó la Escuela de Nivel Medio y Superior Dr. Julio Ossola de esa ciudad.

Ola de calor: qué dice el calendario escolar

 

Bajo el título «No somos beduinos ni ganado. El horno de la escuela pública no está para bollos» el dirigente docente de María Grande Mauricio Castaldo expresó:  «Alumnos y docentes que se descomponen. Docentes que pierden el control del auto por la descompostura y se accidentan. Hagamos responsables de cada cosa que pase a dirigentes oficialistas y opositores que días atrás salieron a hablar irresponsablemente de clases si o sí. Lo mismo va para ciertos padres organizados ideológicamente que mandan cartas al CGE. ¿Y si hubieran tomado en cuenta la propuesta de Agmer María Grande de clases virtuales por unos días hasta que pase el calor?».

«Sarmiento comparaba, de mala manera, a los criollos con beduinos, y por lo que se ve, los sectores de derecha del oficialismo y sus hermanos ideológicos de la oposición, siguen creyendo que somos esos beduinos y que podemos ir sin chistar al aula como si fuéramos a un corral de feed lot. Desde los colectivos de base gremiales planteamos la discusión pública sobre la situación y ante la falta de humanidad y `empatía´ de la que tanto hablan, y animamos a delegados, docentes y directivos a tomar las decisiones que crean justas para resguardar la salud de cada comunidad educativa. Media jornada, clases virtuales por unos días o suspender la actividad pueden decidirse con autonomía y prudencia. Frente al poder burocrático y el despotismo ideológico transversal que no escucha nuestros reclamos, hay que fortalecer un poder gremial, institucional y comunitario que sostenga los derechos de todos», subrayó.

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora