El Tribunal de Juicios y Apelaciones de Concordia aplicó una pena muy leve al exjefe de la División Abigeato de la Policía de San Salvador, José Ramón Ieno, llevado a juicio por quedarse con un cargamento de droga secuestrada en su jurisdicción: seis meses de prisión de ejecución por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público. La resolución fue firmada por los jueces Pablo Garrera Allende, Aníbal Lafourcade y Mariano Caprarulo.

El Ministerio Público Fiscal había pedido la pena de 1 año y 11 meses de ejecución condicional por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público para Ieno por haberse quedado con un cargamento de droga secuestrada en un operativo. La Fiscalía desestimó finalmente el cargo de peculado que se le había reprochado por lo cual en un primer momento se barajó pedir una condena de 3 años de cárcel.

En realidad, Fiscalía pidió la «absolución» por el delito de peculado por cuanto no se daría el tipo penal en la conducta que se le reprochó al jefe policial. El tribunal efectivamente absolución al exjefe policial por el delito de peculado

 

Ieno durante su función había protagonizado un escándalo, primero, y después un hecho gravísimo del cual la Justicia se enteró un mes después de sucedido. Una noche fue interceptado mientras llevaba en el baúl de su auto particular un cordero faenado clandestinamente; pero el principio del fin de la carrera policial de Ieno ocurrió en los primeros días de diciembre de 2019 cuando se abrió una investigación por la desaparición de un cargamento de droga secuestrado del cual el jefe de Abigeato jamás informó a las autoridades policiales ni judiciales.

En principio, el juicio oral se había programado para los días  viernes 21 y lunes 24 de abril, ante un tribunal unipersonal integrado por la jueza Carolina López Bernis, vocal del Tribunal de Juicios y Apelaciones de Concordia.

Esas fechas, sin embargo, quedaron aplazadas y se fijó audiencia para los días 10 y 11 de mayo. ¿La razón? El policía Ieno, funcionario público en funciones, debe ser juzgado por juzgado por un tribunal colegiado de tres magistrados. Serán los vocales del Tribunald de Juicios y Apelaciones de Concordia Pablo Garrera Allende, Mariano Caprarulo y Aníbal Lafourcade, quienes estarán al frente de las audiencias.

En la imputación, se le reprocha a Ieno que el 22 de noviembre de 2019, aproximadamente a las 20,40, en en el marco de operativo realizado por personal perteneciente a la Brigada Abigeato de San Salvador, se halló y secuestró: una gorra gris con visera de color negro que en su interior tenía una media negra, con una bolsa de nylon que en su interior tenía trozos de una sustancia amarronada compacta, presumiblemente estupefacientes de la especie marihuana.

El hallazgo se produjo en el camino que va de General Campos a Puerto Yeruá.

“Dichos efectos (gorro y estupefaciente) le fueron confiados al jefe de la Brigada de Abigeato, José Ramón Ieno, dentro de un sobre en  un cajón del escritorio de la oficina, quien sustrajo dichos efectos de la esfera de la Administración Pública y omitió intencionalmente ejecutar lo prescripto en el Código de Procedimiento de Entre Ríos Ley Nº 9,754 y su modificatoria Ley Nº 10.317, en el marco de ejercicio de su funciones en carácter de Jefe en turno de la Brigada Abigeato de San Salvador, no comunicando a las autoridades correspondientes Delegación de Toxicología, Unidad Fiscal y Jefatura Departamental, y sustrayendo dicho efecto que se encontraba bajo su estricta custodia», dice la imputación.

El caso se conoció luego de una denuncia que hiciera en diciembre de 2019 el entonces jefe de Prevención de Delitos Rurales de la Policía, Nelson Vega. En declaraciones periodísticas, Vega sostuvo que a Ieno “lo metieron preso» luego de un operativo que se concretó  en rutas 12 y 3, cuando «se escapaba a la noche sin autorización. Eso es abandono de servicio y de sus funciones, es una cuestión que para la policía es importantísimo porque debe cumplir los horarios de trabajo”.

Entonces, al jefe policial infiel se le apartó del servicio.  «Además -contó Vega-, al otro día realicé averiguaciones en San Salvador y no me gustó los comentarios de la gente del campo y de algunos comerciante de la carne: pedían carne, la Dirección no les inculca que salgan a pedir carne para comer, ni colaboración, esta situación me enoja muchísimo, me entristece».

“Es verdad que se le encontró que llevaba un cordero faenado para la casa en su auto particular. Más allá que argumentó que lo compró, no es ético para un jefe de brigada. El personal de brigada está muy dolido por esta situación, con qué objetividad puedo controlar las carnicerías si le pedía carne. Eso me manifiestan algunos carniceros. Como puedo controlar cuando entra carne clandestina, Ieno no vuelve más a San Salvador”, afirmó Vega.

Por otro lado, el Comisario Vega apuntó, “este jueves llega a la brigada de San Salvador un oficial nuevo que no viene de abigeato, trabajaba en una departamental, el sub inspector Cuartino, oriundo de Santa Elena”.

El miércoles 15 de marzo último, el Gobierno inauguró en San Salvador las nuevas instalaciones de la Brigada de Abigeato pero no hubo entonces ninguna mención al jefe caído en desagracia. El director de Prevención de Delitos Rurales de la Policía de Entre Ríos, Favio Noya, pasó por alto la gestión de Ieno.

Según recogió el sitio Noticias y Hechos, Noya recordó cómo se gestó la construcción del nuevo edificio. “En el año 2018, el jefe de Brigada era el actual comisario César Godoy. Hizo un proyecto con una arquitecta, se inició la construcción de este edificio, y pudo llegar a los cimientos.  Posteriormente, hubo un cambio de jefe de dependencia. En el año2019 se hace cargo el subcomisario Arellano. Llegó la pandemia. En el años 2021, Arellano pudo seguir con la construcción y hoy por hoy se encuentra finalizada», recordó.

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora