El juez de Garantías Mauricio Mayer le impuso este jueves prisión preventiva por 15 días en la Unidad Penal de Paraná a Jorge Nicolás Martínez, la expareja de Fátima Acevedo, la chica de 25 años que está desaparecida desde el domingo.
En la audiencia, que arrancó a las 13,30 y terminó a las 15, los fiscales de la Unidad de Abuso Sexual y Violencia de Género Leandro Dato e Ileana Viviani solicitaron al juez que el imputado sea alojado en la Unidad Penal durante 60 días. Al fundamentar el pedido, aseguraron que existen riesgos de que el acusado entorpezca la investigación penal preparatoria.
Por su parte, el abogado defensor Franco Cánepa Azziani solicitó que su cliente, de 34 años, empleado del Hospital San Martín, sea excarcelado o, en última instancia, que se le aplique prisión domiciliaria con tobillera electrónica y custodia policial.
Al plantear el pedido de prisión preventiva por 60 días, la fiscal Viviani señaló que a Martínez se le imputan los delitos de amenazas, lesiones graves y agravadas en grado de tentativa; privación de la libertad coaccionada en contexto de violencia de genero contra la mujer; y defraudación en grado de tentativa.
En relación a la primera imputación, señaló: “Presumiblemente el 31 de enero de 2020, en el domicilio de calle Hernandarias, Jorge Nicolás Martínez, en el marco de una convivencia caracterizada por violencia psicológica y sexual, intentó arrojarle ácido muriático a su pareja Fátima Florencia Acevedo, no logrando su cometido por razones ajenas a su voluntad. Asimismo, sin poder precisarse el día, durante el año 2020 afiló una cuchilla frente a su pareja”.
En cuanto al segundo hecho, la fiscal dijo que el 5 de febrero la Justicia le impuso medidas restrictivas a Martínez, tendientes a no acercarse ni molestar a la joven; pero que “en fecha 1° de marzo, presumiblemente en horario cercano al mediodía, Jorge Nicolás Martínez retuvo en contra de su voluntad a Acevedo, con quien mantuvo vínculo de pareja desde 2012 y con quien tuvieron un hijo en común”.
La acusadora refirió que el imputado la mantuvo oculta “en un lugar que no se ha podido determinar hasta el momento., privándola de su libertad y autonomía con el fin de que continúe junto a él en pareja”.
“Esto ocurre en el marco de una relación de sometimiento caracterizada por violencia física, psicológica y sexual, durante la cual Martínez le ha manifestado a Acevedo en reiteradas oportunidades: ‘Si no sos mía, no sos de nadie’; ‘puta regalada’, y que en diversas ocasiones le ha propinado golpes y arrojado objetos”, agregó la fiscal.
En cuanto al tercer hecho, la representante del Ministerio Público Fiscal refirió que “el 2 de marzo de 2020, en horario 16,33, siendo estado público el pedido de localización de su expareja utilizó la tarjea de cobro de Acevedo, que previamente le sustrajera ilegítimamente”. Y precisó que intentó sustraer dinero de un cajero de la sucursal del Banco Bersa, ubicado en calle Gualeguaychú.
Luego la fiscal mencionó que en el teléfono del acusado se encontraron llamativos mensajes guardados como “notas”. Se trata de un texto que fue enviado desde un chip al teléfono de una amiga de Acevedo. La tesis esgrimida por la fiscal es que el imputado, aparentemente, se hizo pasar por la joven.
Luego, el fiscal Dato informó que se comprobó que uno de los chips de telefonía celular hallados en la casa de Martínez pertenece efectivamente a Acevedo. En ese punto, hizo notar que el aparato no fue encontrado y marcó como llamativo que el hombre tenga en su poder el chip.
Más adelante, el defensor de Martínez, el abogado Cánepa Azziani solicitó directamente que su cliente sea excarcelado puesto que, aseguró, durante toda la investigación se puso a disposición de la Fiscalía, no demostrando en ningún momento entorpecer con la pesquisa.
Por otra parte, aseguró que en la causa declaró como testigo su hermana –del abogado- quien afirmó que vio a la joven subirse a un colectivo días atrás. El abogado cuestionó que la Fiscalía aún no haya revisado las cámaras de seguridad que prueben esa declaración testimonial que consideró de vital importancia.
Por otra parte, intentó justificar que su cliente haya tenido en su poder la tarjeta de débito de Acevedo, en el hecho de que tuvieron una relación de años. “Todos prestamos nuestra tarjeta alguna vez, y más a alguien que conocemos desde hace tiempo”, dijo.
Finalmente, tras oír las posturas de las partes, el juez Mauricio Mayer dio una larga explicación sobre los alcances procesales de su decisión y terminó considerando justo alojar al imputado durante 15 días en la Unidad Penal de Paraná, a fin de poner a resguardo la investigación. Aclaró, no obstante, que la medida impuesta volverá a discutirse una vez cumplido el plazo.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora