El villaguayense Dante Hernán de la Casa dejó el servicio activo en la Iglesia. Se volvió a su casa. La decisión, bastante corriente entre el clero, derivó en un reemplazo en el lugar adonde había sido destinado: era vicario en la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, de Paraná.

A ese lugar, el arzobispo Juan Alberto Puiggari ya destinó a otro vicario: Matías Jacob.

Puiggari había ordenado sacerdote a De la Casa el sábado 13 de mayo de 2017 en la Iglesia Catedral de Paraná. Al día siguiente, el domingo 14, celebró su primera misa en su ciudad, Villaguay, en la parroquia Inmaculada Concepción.

“La verdad que me siento rebosante de alegría. No sólo por esta ordenación sino también por la gracia de la Pascua. Tuve la gracia de vivir esta Semana Santa como una preparación y en ella pensaba que la próxima vez podré celebrar. Con estos sentimientos me voy preparando y pido a Dios la gracia de poder entregarme con mucha alegría al Pueblo de Dios”, decía De la Casa a la radio del Arzobispado, Radio Corazón, un mes antes de ordenarse cura.

“Yo vengo de Villaguay. Ahí estuve en la parroquia Inmaculada Concepción. Cuando era gurí, ingresé al grupo Scout. Hice el discernimiento por varios años. Estudié en Paraná, y mientras estudiaba hice la última etapa de este discernimiento. Siempre el Señor llamó, pero suele pasar que uno dice que no y rumbea para otro lado hasta que el Señor se hace escuchar”, comentó. Ingresó al Seminario Arquidiocesano Nuestra Señora del Cenáculo en 2008. Recibió la ordenación del diaconado en 2014, y entonces ya fue destinado al Sagrado Corazón de Jesús, en Paraná.

“Le pido a Dios a prepare mi corazón para que pueda recibir este don enorme, y que siempre me mantenga encendido en la alegría. En la alegría de saberme amado. Y que pueda entender que Él me eligió para ir al servicio de los demás. Le pido a Él la gracia de ser fiel, de poder entregarme con generosidad. Poder aceptar mis límites, mis dificultades y que éstas se transformen en un trampolín para poder recibir la Misericordia de Él. Mi gran deseo es poder ser instrumento”, decía entonces.

«Dante pidió un tiempo fuera del ejercicio del ministerio. Y salió de la parroquia en donde estaba», explicaron desde la curia. «A fin de año se nombró un vicario en la parroquia en la que estaba -agregaron-. Tiene contacto permanente con el obispo».
De la Redacción de Entre Ríos Ahora
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