El conflicto por el posible cierre de la sucursal Paraná del supermercado Vea, propiedad de la multinacional chilena Cencosud, ingresó en compás de espera luego de la Secretaría de Trabajo dispusiera, este jueves, la conciliación obligatoria por 15 días hábiles.
La medida congeló la decisión que la firma trasandina ya había resuelto y comunicado a los 60 empleados del local ubicado sobre Avenida Almafuerte y Avenida Zanni: el cierre. La mala nueva ya había sido transmitida también, en forma oficial, por el abogado paranaense Carlos Moro en la audiencia del último lunes.
Y fue ratificada este jueves por los delegados de Cencosud que llegaron a Paraná: Javier Santos, gerente de Relaciones Laborales; Carina Ponce, gerente de Recursos Humanos; y José Luis Ramírez, gerente comercial. Frente al titular de Trabajo, Ángel Zacarías, al secretario general del Sindicato de Empleados de Comercio, Daniel Ruberto, y los delegados de los trabajadores de Vea, reafirmaron la voluntad de bajar las persianas al ratificar “la situación crítica de la sucursal Paraná teniendo en cuenta los resultados económicos negativos prolongados en el tiempo”, según consignó el acta que firmaron las partes.
En ese encuentro de este jueves en Trabajo, el titular del Sindicato de Comercio expresó su rechazo al cierre de la sucursal de Vea en Paraná –que llegó a la ciudad en diciembre de 2001-, anticipó que en ese escenario los trabajadores endurecerían las medidas de acción directa y, luego, planteó un nuevo escenario posible: que un grupo inversor de la ciudad estaría interesado en tomar a su cargo el supermercado, con toda su plantilla de persona.
De acuerdo al acta que se firmó en Trabajo, el dirigente sindical informó a todas las partes “que un grupo inversor de la ciudad de Paraná se encuentra interesado en adquirir el supermercado con todos los trabajadores, invitándolos (a los actuales responsables de Vea) a comunicarse con los mismos con el objeto que la variable de ajuste no sean los trabajadores, como lo propone la empresa e intentar salvar las fuentes de trabajo de 60 familias”.
El grupo inversor interesado en quedarse con Vea sería el mismo que en junio último tomó a su cargo el supermercado La Peruana, según fuentes sindicales.
El grupo Gotte, que había desembarcado en 2008 y adquirido una empresa que hasta entonces era familiar, de los Valin, se desprendió de La Peruana SRL, y se la vendió por casi 1 millón de dólares a un grupo conformado por el contador Andrés Darío Gamarci, el empresario del rubro maxikiosco Matías Leonel Santa María; y el dueño de una cadena de caricerías, Cristian Javier Vital.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora