La aparición en la casa de retiros Padre Lamy, de Oro Verde, del cura Juan Diego Escobar Gaviria, con una causa por abuso de menores en la Justicia de Nogoyá, sorprendió a propios y extraños.
Hasta la Casa Lamy, ubicada a un costado de la ruta11, se dirigió en su búsqueda una comisión policial el martes por la noche, luego de que el juez de Garantías de Nogoyá, Gustavo Acosta, librara una orden de detención del sacerdote.
El jueves 27, Escobar Gaviria había abandonado su parroquia, San Lucas Evangelista, de Lucas González, adonde estaba destinado desde 2005. Fue por decisión del arzobispo Juan Alberto Puiggari, que le pidió que se fuera de la ciudad y buscara una casa de retiros donde permanecer alojado.
Puiggari sabía de una presentación en la Justicia de dos monjas del Colegio Castro Barros, de Lucas González, que denunciaron a Escobar Gaviria por abuso. Desde entonces, y mientras dure la causa en la Justicia, el sacerdote tiene prohibido oficiar misa en público.
Desde el jueves 27 hasta el martes, que se supo que Escobar Gaviria estaba recluido en la Casa Padre Lamy, su paradero fue desconocido. La curia se negó a informar, aunque admitió que no había salido de la provincia. El martes por la tarde, el fiscal Federico Uriburu recibió un correo electrónico del Arzobispado de Paraná, en el que le indicaron el lugar donde estaba el sacerdote.
Entonces, una partida policial partió desde Nogoyá con destino a Oro Verde. En medio, los abogados del cura, Juan Pablo Temón y Milton Urrutia, fueron en su búsqueda y lo entregaron en la Jefatura de Policía de Nogoyá.
En medio, las autoridades de la Casa Padre Lamy salieron a “aclarar” cuál fue su rol en este enredado asunto.
Este es el comunicado que dio a conocer el superior de la Casa Padre Lamy, el padre Samuel, de los Servidores de Jesús y de María: se llama “Informe sobre la acogida al cura Juan Diego Escobar Gaviria en la Casa Padre Lamy”.
“- Domingo 30 de octubre: el sacerdote Juan Diego Escobar Gaviria pidió hacer un retiro de unos días, sin dar explicaciones.
– Lunes 31 de octubre: el padre Juan Diego informó el superior de la Casa, padre Samuel, de la razón de su presencia. Dijo que una familia de su parroquia, de San Lucas Evangelista, de Lucas González, lo denunció por un supuesto abuso sobre su hijo menor. El necesitaba alojarse en una casa de retiros, rezar y evitar el contacto con la gente, esperando que la justicia lo llame.
El arzobispo Juan Alberto Puiggari vino para encontrarlo y (sic) informarnos de su deseo de transparencia con la justicia.
Decidimos permitirle quedarse en Casa hasta que la justicia se manifieste.
– Martes 1 de noviembre: nos enteramos a mediodía, por Facebook, que el juez de Garantías de Nogoyá, Gustavo Acosta, libró a la mañana una orden de captura del cura Juan Diego Escobar Gaviria.
El arzobispo vino para encontrar el padre Juan Diego y nos dijo que informó al juez y a la policía que el padre Juan Diego estaba alojado en nuestra Casa. Nos avisó que la policía lo iba a buscar a la tardecita.
A la tarde, el padre Juan Diego se fue para entregarse, por propia iniciativa, al juez de Garantías de Nogoyá.
Padre Samuel, s.j.m.”
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.