El femicidio de María Julieta Riera, de 24 años, es el segundo que se produce durante la cuarentena social, preventiva y obligatoria en Entre Ríos y el cuarto en lo que va del año.
Por el crimen, el principal acusado es su pareja Jorge Julián Christe, de 31 años, que se encuentra detenido en la Alcaidía de Tribunales de Paraná. A Christe se le atribuirá el delito de homicidio calificado por violencia de género (femicidio), por el vínculo y alevosía. Los primeros datos indican que el hombre se preparaba para ser piloto comercial y que es hijo de la excamarista paranaense María Victoria Stagnaro.
La primera información de la mañana del jueves indicaba que la joven murió en la madrugada al caer desde un departamento del octavo piso en el complejo de departamentos, ubicado en San Martín 918, donde funciona el Instituto del Seguro de la provincia. Ahora, la justicia sospecha que fue arrojada.
Los investigadores intentan reconstruir qué sucedió en el departamento del octavo piso momentos previos a la caída, puesto que según informó la Fiscalía en un parte de prensa, la autopsia realizada a María Julieta Riera indicó “la existencia de concretos signos de violencia previos al fallecimiento”.
Chistre, pareja de Riera, fue quien dio aviso de lo sucedido a la policía en las primeras horas del jueves. Lo hizo en la comisaría que se encuentra en calle Córdoba, al costado de la Casa de Gobierno.
En un primer momento había intervenido en la investigación el fiscal Ignacio Aramberry, pero al constatarse la posibilidad de que se estaba ante un femicidio, intervino Leandro Dato, fiscal de la Unidad de Violencia de Género y Abuso Sexual.
En este caso donde la muerte estaba en duda, se siguió el criterio que dispuso el Ministerio Público Fiscal en una resolución del 26 de marzo: en caso de que existieran denuncias, intervenciones previas u otros indicios que den cuenta de la posible existencia de una situación de violencia de género, se ordenará la realización de la correspondiente autopsia médico legal.
Los resultados de la autopsia en el cuerpo de Riera llegaron por la tarde, en los que se consignó señales de violencia previos a la muerte. Lo informado por los profesionales de la morgue de Oro Verde fue determinantes para que el fiscal anuncie que imputará a Chistre por el homicidio calificado por violencia de género, por el vínculo y alevosía.
Recuerdo de una amiga
Florencia Geminiani, contó en Twitter que su amiga, Julieta, era estudiante de abogacía en la Universidad Nacional del Litoral y que su sueño era “luchar contra la injusticia”. “Juli era una persona introvertida, cariñosa, tenía un gran corazón, era buena amiga, comprensiva, sabía escuchar y dar los mejores abrazos,” y que “Juli quería ser abogada, estudiaba en UNL, era su sueño luchar contra la injusticia, sueño el cual se le arrebató, Volá alto hermana!!!”, publicó la joven.
El cuarto femicidio
Riera es la segunda mujer asesinada durante la cuarentena en Entre Ríos. Se da a cuatro días del homicidio de Romina Roda, la joven paceña de 23 años, apuñalada hasta la muerte por su expareja Jonatan Rivero.
Estos dos casos se suman a la trise lista femicidios que tiene la provincia en lo que va del año: el primero fue el 9 de febrero, en Villaguay, cuando fue asesinada Viviana Barreto, de 34 años, a manos de su expareja Maximiliano Alejandro Delgado, de 31. Luego, el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, fue encontrada asesinada Fátima Florencia Acevedo, de 25 años. El principal acusado es su expareja Jorge Martínez, de 35 años.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora