La Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia (STJ) denegó el recurso extraordinario federal que presentó Jorge Julián Christe, condenado a perpetua por el femicidio de su pareja, María Julieta Riera, y de ese modo le trabó la llegada a la Corte Suprema de Justicia de la Nación con la petición de que le sea concedido el arresto domiciliario hasta que la condena quede firme. Con anterioridad, el 30 de septiembre, la Sala Penal le había rechazado una impugnación extraordinaria que había presentado la defensora Mariana Barbitta.

En su voto, el vocal Miguel Giorgio dijo: «No existe en el escrito recursivo que hoy nos convoca desarrollo alguno de una cuestión federal, limitándose la quejosa a reiterar por tercera vez planteos que ya han sido adecuadamente tratados y agotados en las instancias de grado, como así también por esta Sala en ocasión de fundar el rechazo de la impugnación extraordinaria, soslayando por completo los argumentos vertidos en cada oportunidad». Y apuntó:  «La defensa centra su ataque el la decisión del Juez Técnico y no en el fallo que impugna mediante este recurso extraordinario. Una vez más pretende relativizar la firmeza de una sentencia poniendo en jaque elementales institutos del derecho bajo el agravio genérico de vulneración a las garantías elementales de su pupilo».

En octubre pasado, la Cámara de Casación Penal confirmó la condena a perpetua de Christe, y de  ese modo, el tribunal de alzada refrendó el veredicto de primera instancia firmado en 2021 por el juez de juicio Elvio Osir Garzón. Respecto de los insistentes pedidos de arresto domiciliaria que peticionó Christe a través de su defensora Mariana Barbitta -rechazado en sucesivas instancias- Casación entendió que el juez técnico «revocó la prisión preventiva con modalidad de prisión domiciliaria, y dispuso la prórroga de la prisión preventiva en la Unidad Penal N° 1, hasta tanto esta sentencia adquiera firmeza, en tanto a su juicio los riesgos procesales, ante el pronunciamiento del veredicto adquieren una dimensión diferente y necesariamente se deben cautelar ya que sin la presencia del acusado no puede cumplirse la pena».

El fallo que condenó a Christe a perpetua por el femicidio de Julieta Riera en 2020 no está firme: resta el pronunciamiento de la Sala Penal del STJ.

Christe, condenado por femicidio, podrá salir para ver a su hijo

 

Pero lo que sí quedó agotado es el pedido de arresto domiciliario hasta que quede confirme la condena a perpetua.

En cambio, el alto cuerpo que confirmó los fallos anteriores, «sugirió» la «implementación,  mientras dure la medida de coerción personal impuesta -prisión preventiva en la Unidad Penal N° 1-, un régimen de traslados del interno Christe al domicilio donde el menor reside, con frecuencia quincenal y por el tiempo que prudencialmente se estime, en horario diurno, bajo estricta y discreta vigilancia, lo que deberá ser gestionado, si la defensa así lo considera, ante la Magistratura que tiene a cargo al justiciable».  El primer encuentro de Christe con su hijo fue el jueves 22 de diciembre, durante tres horas, en la casa de la abuela del niño, la exjueza Ana María Stagnaro. 

Si Christe quisiera insistir con su pedido de domiciliaria tendrá que ir con un recurso de queja ante la Corte.

 

 

 

El caso

 

El 15 de abril de 2021 un jurado popular declaró a Jorge Julián Christe culpable del femicidio de su pareja, María Julieta Riera, ocurrido el 30 de abril de 2020, cuando la arrojó por el balcón del 8° piso del edificio del Instituto del Seguro ubicado en Peatonal San Martín, de Paraná, frente a Plaza de Mayo. Christe fue hallado culpable del delito de homicidio triplemente agravado por el vínculo, alevosía y violencia de género.

 

La decisión del jurado, integrado por doce personas en igualdad de género, fue por unanimidad y se tomó luego de casi dos horas de deliberaciones, al término de cinco días de un juicio que se desarrolló en el Salón de Actos del Superior Tribunal de Justicia. Tras el veredicto, el fiscal Ignacio Arambery solicitó al juez la detención efectiva de Christe y que revoque la prisión domiciliaria al considerar que existías riesgos de fuga. La defensa, a cargo entonces de los abogados Franco Azziani Cánepa y Ladislao Uzín Olleros, pidió que sea rechazada la petición. El juez Elvio Garzón hizo lugar al pedido de la Fiscalía y revocó la prisión domiciliaria y ordenó que Christe sea enviado a la Unidad Penal Nº 1 de Paraná.

 

Christe, hijo de la exjueza Ana María Stagnaro, cuestionó esa sentencia y acudió ante la Cámara de Casación Penal. En el ínterin, cambió de abogados: Azziani Cánepa y Uzín Olleros dejaron de representarlo, y ahora lo defiende Mariana Barbitta, especialista en Derecho Penal, profesora de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y presidenta de la Asociación de Mujeres Penalistas de Argentina (AMPA). Pero antes de debatir la cuestión de fondo, Barbitta solicitó a la Justicia que se le otorgue a Christe arresto domiciliario y pueda abandonar la Unidad Penal N° 1.

Tanto Casación como la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia (STJ) le negaron el benefiicio de la domiciliaria, y por eso continuará alojado en la Unidad Penal de Paraná. Ahora, le queda una segunda instancia para apelar el fallo condenatorio: después del fallo de primera instancia y del fallo casatorio, a Christe le queda apelar ante la Sala Penal del STJ.

En septiembre último, la Sala Penal del STJ rechazó un recurso de impugnación extraordinaria y le negó el beneficio de la prisión domiciliaria a  Christe, condenado a perpetua en 2021 por el femicidio de su pareja, María Julieta Riera, y de ese modo confirmó dos fallos anteriores que lo enviaron a la Unidad Penal N° de Paraná, con prisión preventiva. Christe, a través de su defensora, Mariana Barbitta, pidió el beneficio de la prisión domiciliaria para poder atender a su hijo menor de edad.

 

El 7 de septiembre se realizó una audiencia en la que la defensora de Christe, Mariana Barbitta, pidió el beneficio de la prisión domiciliaria.

“No maté a Julieta, eso que pasó fue un accidente. No soy una persona peligrosa”, dijo ese día Christe, ante los tres vocales de la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia (STJ) que revisarán su pedido de salir de la Unidad Penal N° 1 y cumplir prisión domiciliaria: Claudia Mizawak, Miguel Ángel Giorgio y Martín Carbonell.

La última vez que el hombre de 33 años se había expresado fue el 15 de abril de 2021, en la última audiencia ante el jurado popular que terminó por encontrarlo culpable del delito de homicidio agravado por el vínculo, alevosía, y por haber sido perpetrado mediando violencia de género. Los 12 jurados consideraron probada la acusación fiscal de que el 30 de abril de 2020 Christe arrojó por el balcón, desde un octavo piso de un edificio del microcentro de Paraná, a su pareja de 24 años.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora