Los representantes docentes en los órganos colegiados del Consejo General de Educación (CGE), con Susana Cogno, como vocal gremial a la cabeza, expresaron “el más enérgico repudio a la patronal” por “la instrumentación de prácticas de hostigamiento, presiones y sumarios a las y los directivos y supervisores, que se negaron a cargar los paros durante el 2024”. Y agregaron: “Esto constituye una muestra más de las practicas persecutorias y antisindicales de la patronal. El ejercicio del derecho a huelga, además de un derecho consagrado en la Constitución Nacional es un derecho inalienable de la clase trabajadora”. Además, recordaron que reiteradas veces “hemos demostrado que el paro es un derecho y como tal, no puede ser un requerimiento la información y carga que se exige a los equipos directivos sobre el relevamiento de las y los docentes adheridos a las medidas de fuerza declaradas por los sindicatos docentes, esta exigencia es una práctica de persecución al ejercicio de un derecho que tiene garantías, máxime cuando la política de persecución se convierte en sancionatoria. Las cargas y constataciones serán obligación de los cargos políticos que no concursan, no son electos siendo designados de forma directa y últimamente ni siquiera cumplen los requisitos de las leyes para acceder a los cargos que detentan. Esta actitud se enmarca claramente en persecución sindical laboral, es una conducta que aten-ta contra la libertad de las y los trabajadores y genera un ambiente laboral opresivo, vulneran-do derechos laborales, precarizando las condiciones de trabajo y quebrantando la democracia del sistema educativo”.

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora