La cadena de electrodomésticos Ribeiro cerró este martes su sucursal en Paraná y dejó a 11 trabajadores en la calle. La novedad les comunicada de forma intempestiva por un gerente regional de la empresa, que hoy llegó a Paraná con una orden inapelable: bajar las persianas y no permitir el ingreso de nadie.

Gustavo Varela, uno de los que quedaron sin trabajo, contó que las 8 de la mañana de este martes se presentaron a trabajar y ya no pudieron ingresar al local de Ribeiro. De igual modo, algo presentían: hace dos meses que no cobran salarios, la última semana aplicaron un virtual paro, con retención de servicio durante las 8 hora, y sabían que el alquiler del local, que vence a fin de año, no sería renovado.

El enviado de Ribeiro llegó con una propuesta de ajuste salvaje: pagar el 100% de la indemnización pero en cuotas, con la firma de un acta acuerdo en la que quedaría asentado que la desvinculación se daría por «mutuo acuerdo», una cláusula que entre otras cuestiones les impediría percibir el seguro de desempleo a los 11 despedidos. La idea de la firma es saldar la indemnización en 8 cuotas.

Pero la propuesta fue rechazada por el personal, con el asesoramiento del Sindicato de Empleados de Comercio de Paraná. En vez de eso, los trabajadores hicieron una contraoferta: cobrar el 100% en 3 cuotas. La propuesta fue llevada por el delegado de Ribeiro a Buenos Aires, y ahora se abrió un compás de espera. Los trabajadores de la cadena tienen una antigüedad de 9 años, el tiempo que lleva la sucursal operando en la ciudad.

Ahora, aguardarán la respuesta de la casa central de Ribeiro.

Con casi 110 años de historia, Ribeiro es un gigante que no se pudo reponer a la crisis económica y ha venido cerrando sucursales en todo el país. Decidió el cierre de los locales de Dean Funes, en Córdoba, y Charata, en Chaco. También bajó las persianas en Villa Constitución, Ramallo y Santa Rosa, en La Pampa. A fin de octubre, cerró la sucursal de Las Varillas, en Córdoba; antes, cerró Casilda, Arrecifes, San Nicolás, Resistencia, Saénz Peña y Flores.

Desde enero paga los sueldos en cuotas y recién hace pocos días, saldó los sueldos de agosto. Debe los sueldos de septiembre y octubre y parte del aguinaldo.

Afectada por la caída del consumo, los ingresos de su último balance anual pasaron de $11.000 millones en junio 2018 a los $5.400 millones en el mismo mes de este año. A esto se suma una pérdida anual de $1.378 millones. Ya tenía acumulado un resultado negativo de $190,6 millones. En todo el país, emplea a 1.500 personas.

Afectada por la caída del consumo, la compañía informó en su último balance anual que sus ingresos pasaron de $11.000 millones en junio 2018 a $5.400 millones en el mismo mes de este año (-51 %).

La cadena tiene 85 locales pero cerró puntos de venta en San Nicolás y San Luis y ajustó el metraje de sucursales en Santa Rosa, Roque Saénz Peña, Mar del Plata, Las Varillas, San Juan y Villa Constitución.

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.