La discusión paritaria salarial con los docentes se lleva adelante en un escenario muy desventajoso para los trabajadores de la educación: en 2020 el Gobierno provincial no dispuso aumento salariales surgidos de negociaciones sino que aplicó sumas fijas por decreto.

El 1° de octubre de 2020 el Poder Ejecutivo provincial cerró la negociación iniciada con los sindicatos y anunció el pago de una suma fija para los meses de octubre, noviembre y diciembre de $4.000 para los agentes que perciban hasta $35.000; $3.500 para los que perciben de $35.000 a $55.000; y $3.000 para los que perciben más de $55.000 a $120.000. Esos pagos se continuaron en 2020 a cuenta de la paritaria.

Los docentes tuvieron su primera reunión el 27 de enero y en ese marco el Gobierno anunció que haría una oferta el 4 de febrero, lo que efectivamente ocurrió.

La oferta, rechazada por insuficiente por los gremios docentes, buscó llevar el salario del cargo testigo, l maestro de grado sin antigüedad, a $30.838, un aumento del 33,1%.

La propuesta quedó lejos de las aspiraciones del mayor gremio de los maestros en la Provincia, la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer). En efecto, Agmer había pedido, primero, recuperar la «pérdida» de salarios por inflación en 2020, 36,1%; y que se presente una oferta para 2021, que incluya una cláusula de actualización en función del índice inflacionario.

En vez de eso, el Gobierno propuso:

  • A partir de los haberes de marzo, un incremento del 15% sobre los sueldos vigentes a septiembre de 2020.
  • Y pagar el 50% de la suma fija que se empezó a pagar en octubre -de entre $3.000 y $4.000, según la escala salarial- transformarlo en remunerativo «y se mantiene el otro 50% como no remunerativo (en negro)».
  • El mínimo garantizado a los docentes sería así de $30.446, una suba del 31,22%.
  • A partir de mayo, convertir en remunerativo el otro 50% de la suma fija.
  • Así, el mínimo pasaría a $30.838, con un aumento del 33,1%.

El último dato que dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) reveló que la canasta básica total que mide la línea de indigencia está hoy en $23.722; mientras que la canasta básica total, que mide la línea de pobreza, en $56.459.

El docente uruguayense Luis Fernández, exintegrante de la conducción provincial de Agmer, sostiene que hoy el salario inicial de un maestro compra con su salario el valor de la canasta básica que mide la línea de indigencia. «La canasta está en $ 23.722,21 y el inicial docente en $ 24.865, eso equivale a un 104,82% de la canasta. Es decir, una canasta y un 4,82 % más. En números, una canasta más dos kilos y medio de yerba», ejemplifica.

En cuanto a la canasta básica total que mide nivel de pobreza, cuyo valor hoy es de $56.459, el salario inicial docente alcanza para comprar sólo el 44 % de esa canasta. «Creo que esta instancia de negociación es crucial -dice Fernández-. Acá se convalida la pérdida de 2020. El Gobierno nacional habla que los salarios deben crecer por encima de la inflación, pero lo hace a partir de considerar la inflación proyectada para 2021. Esto constituiría una falacia del tipo de la falsa equivalencia, porque no sabemos qué porcentaje inflación se alcanzará en 2021. Ahora, lo que sí sabemos es que no será la proyectada. Incluso, en nuestra región la inflación 2020 fue superior a la media nacional. Y otro detalle: las canastas aumentan por encima del índice de inflación mensual, y esto es porque los aumentos se concentran sobre los alimentos».

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.