Hay un Sagrado Corazón. Un San Cayetano. Un San Escrivá de Balaguer. Vírgenes en su variadas apariciones. Todo eso está en en la puerta de ese caserón ubicado en plena Avenida Alameda, un edificio señorial muy venido a menos, rasgada su estructura producto. La casa, pegada a una torre amplísima, está desocupada, y en la vereda, se instaló un cuidacoches que ahora amplió su rubro. Tiene un puesto de libros usados, y un pequeño santuario. Postales que ofrece al paso la ciudad.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.