«Emergencia ya», decían los carteles que exhibieron las mujeres que fueron a presenciar la sesión de la Cámara de Diputados de Entre Ríos de este martes.

La sesión transcurría con la habitualidad acostumbrada, cuando al cabo de una exposición de la diputada Rosario Romero, sobre la reforma de la Ley de Prevención de la Violencia Familiar Nº 9.198, y antes de que el presidente de la Cámara, Sergio Urribarri, convocara a votar la iniciativa, se levantó de las gradas la dirigente Jorgelina Londero, de la Multisectorial Feminista, y pidió hablar.

Y dijo: “Señor presidente, señora diputada Romero, las mujeres aquí presentes, representantes de organizaciones de la ciudad de Paraná y la provincia, solicitamos y exigimos ser escuchadas. Consideramos que todo lo que esta Cámara decida, no vale nada si no declaran la emergencia por violencia de género. Nosotras estamos en la calle organizadas. Hace dos años gritamos en las plazas que no queremos ni una muerta más, no ni una menos. Basta de matarnos. Ninguna ley es suficiente sin la emergencia. Que la emergencia sea presupuestaria”.

La dirigente cerró con una frase que fue una demanda: «Si quieren hacer algo por nosotras, hagan eso».

Terminó de hablar Londero, y Urribarri quiso retomar el ritmo de la sesión, pero cuando se dispuso a hablar, el cántico de las mujeres sonó más fuerte que su tono de voz. Las mujeres presentes en una de las gradas que daba justo al frente de la presidencia de la Cámara, donde estaba sentado Urribarri, reversionaron el tema «Cómo me voy a olvidar», de Los Decadentes, y les hicieron notar las fotos que viralizaron todos los dirigentes políticos durante el primer #NiUnaMenos de 2015.

Cantaron: “Cómo nos vamos a olvidar/ de aquella foto del Ni Una Menos / cuando en la realidad no nos destinan ni un solo peso /gritamos hoy, gritemos fuerte /ya no queremos más muertes /por eso hoy /vamos a luchar /y exigimos la emergencia provincial»

El canto de las mujeres se intentó acallar con un sonoro: «Shshsh». Se escuchó perfectamente en todo el recinto: el reclamo se quiso silenciar, pero sonó más fuerte.

Entonces, habló la diputada Emilce Pross (FPV), que anunció que desde la Banca de la Mujer , en 15 días, «vamos a pedir una reunión y vamos a citar a las compañeras».

No pudo seguir.

La interrumpió la dirigente Nadia Burgos, otra vez desde las gradas: “No necesitamos reunirnos con ustedes, necesitamos respuestas. ¿Cuántas más tienen que morir y ustedes quieren que nos reunamos?. Basta».

Otra vez el mismo sonido onomatopéyico de silencio: «Shshsh».

Intentó terciar la diputada Ayelén Acosta (Cambiemos), para decir que su bloque ya había presentado en 2016 un proyecto de declaración de la emergencia en violencia de género en la provincia.

No sirvió de mucho. Las mujeres que habían ido a hacerse escuchar en Diputados se retiraron. Habían logrado su cometido: hacerse escuchar.

Aunque a la vez recibieron una sorda respuesta de la Legislatura: «Shshsh».

 

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora.