Es como que se apague el GPS. O que el celular pierda la señal. Las rutas sin señalizar son un camino en penumbra. Y no están señalizadas las rutas por el vandalismo, primero, y la desidia, después. En los ingresos a la ciudad, las señales de tránsito han ido desapareciendo en forma paulatina, pero ningún funcionario ha tomado la decisión de reponerlas. Desaparecen, llevadas por el viento, destruidas por el vandalismo, y así quedan: postes ausentes, sin cartelería. Sin señal.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.