La Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader) deberá abonar más de $1,5 millones de pesos en concepto de honorarios y, además, cancelar en un plazo de dos días los salarios que adeuda a una preceptora del Colegio Histórico Justo José de Urquiza, de Concepción del Uruguay, que depende de la Facultad de Ciencia y Tecnología.

El Superior Tribunal de Justicia (STJ) dio vuelta así un fallo de primera instancia que había firmado en la feria de julio último la vocal de la Sala I de la Cámara Laboral, Gabriela López Arango. En el reclamo iniciado por la docente Nancy Demarlenge, la jueza López Arango entendió que «de las constancias documentales obrantes en autos se desprende con meridiana claridad que existieron vías administrativas en trámite previo a la promoción de este amparo que buscaban la solución perseguida mediante esta acción. Repárese que la actora formuló el juramento de no haber promovido otra acción o trámite pendiente cuando en rigor y conforme luce de la presentación fechada 2/7/24, recepcionada en fecha 5/7/24 ante la Universidad accionada, se efectuó una actuación administrativa tendiente a obtener el cobro de los haberes de preceptoría adeudados aquí reclamados».

«Es evidente -planteó la magistrada- que la cuestión traída a decisión ya se encontraba en vías de solución ante la propia administración de la accionada pues en fecha 5/7/24 el decano Juan Pablo Filipuzzi suscribe la resolución en el expediente Administrativo Ref.Not-S01: 12481/2024». Y sostiene que la docente inició el reclamo administrativo ante Uader a principios de julio «sin aguardar un tiempo mínimo de respuesta ya que a escasos días otorga poder y promueve la acción de ejecución lo que en mi entendimiento tornaría inadmisible su accionar».

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Pero el razonamiento de López Arango fue dado vuelta por el STJ. En su voto, la vocal Laura Soage. «Ha sido expresamente reconocido por la demandada que se ha omitido abonar a la actora el haber correspondiente al mes de mayo del corriente año correspondientes a dicho cargo (Preceptora). La Uader, luego de reconocer la falta de pago, expresó (…) que la demora en el pago se encontraba subsanada ya que `el gozo efectivo de los emolumentos operará cuando se paguen los haberes correspondientes al mes de julio, el venidero mes de agosto`”, detalló Soage y señaló que en la sentencia se receptó dicha posición y se declaró abstracta la cuestión de fondo, con costas a cargo de la docente.

Soage sostiene que la docente debió cobrar su salario de mayo a los diez días del mes siguiente. «Desligar la responsabilidad por la falta de pago en la demora que el Colegio Justo José de Urquiza habría incurrido en efectuar el alta, no constituye una `razón fundada` que habilite a apartarse de los plazos dispuestos por el citado decreto, máxime cuando estamos refiriéndonos a los haberes del mes de mayo de 2024», señaló.

Y concluyó que «resulta claro que se vio obligada a iniciar la presente acción por ser la única vía pertinente y adecuada para traer certeza a su situación y restaurar la vulneración de su derecho alimentario. Por ello, las costas del presente deben imponerse a la Uader, que no sólo ha reconocido el incumplimiento del pago de los haberes objeto de reclamo, sino que ha pretendido justificar su omisión, sin dar razones que justifiquen debidamente su proceder».

Walter Baccon, secretario adjunto de la seccional Uruguay de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), indicó que «el problema del retraso en el pago de salarios en Uader en general, y en el Colegio Histórico en particular viene desde hace más de 20 años. Es un problema de caracter estructural y burocrático. Desde que el Colegio dejó de pertenecer al Consejo de Educación y pasó a la esfera de la Uader, empieza un problema burocrático por el cual cada vez que se concursa en un cargo o en horas cátedra, se tarda no menos de tres meses para cobrar el salario. Eso es una irregularidad. Es inconcebible que uno tome un trabajo y se tarde 90 o 120 días para cobrar».

Baccon contó que en esa situación, retrasos de más de tres meses en el cobro de salarios, están 54 docentes del Colegio Justo José de Urquiza. «Gente que entró a trabajar en marzo o abril, y en agosto todavía no ha cobrado los cargos o las horas cátedra que tomó», indicó.

-¿Esto pasa en todas las unidades académicas de Uader?

-Uader tiene cuatro facultades; yo consulté en dos facultades, y el problema es recurrente en Humanidades y en Ciencia y Tecnología. El retraso en el pago de sueldos de más de 90 días es una práctica habitual, y no debería ser así. Se paga a valor histórico. Si en el medio hay aumentos, pagan con el valor que regía en mayo o en abril.  Una designación que se hace en el Colegio del Uruguay pasa por once oficinas hasta que llega al área de Liquidaciones en el Rectorado, en Paraná. Por eso pedimos un sistema más ágil.

 

 

 


De la Redacción de Entre Ríos Ahora