La Ley Nº 24.521, sancionada en 1995, dio marco legal a la Educación Superior en Argentina, y estableció en su artículo 29º que las universidades «tendrán autonomía académica e institucional», entre otras cosas para definir sus órganos de cogobierno y «administrar sus bienes y recursos, conforme a sus estatutos y las leyes que regulan la materia».

La Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader), creada en 2000 durante el gobierno del radical Sergio Montiel, consiguió su normalización institucional luego de una larga batalla en 2012 y logró un primer paso: elegir sus propias autoridades de gobierno. Luciano Filipuzzi, el segundo rector de Uader elegido por el voto de los distintos claustros (el primero, Aníbal Sattler, estuvo durante dos períodos de cuatro años) se puso como meta un ordenamiento administrativo, en particular la situación del personal docente y no docente.

«Empezamos a ordenar situaciones que venían de años. Entiendo que hoy vamos por el camino correcto, aunque falta mucho, como la cuestión edilicia», admite Carlos Cuenca, decano de la Facultad de Ciencias de la Gestión de Uader. Uader, desde su creación, carece de edificio propio: sólo una de las cuatro facultades, Ciencia y Tecnología, ubicada en Oro Verde, cuenta con edificio. El resto de las unidades académicas -Humanidades, Ciencia de la Vida y la Salud y Ciencias de la Gestión- comparten escuelas primarias y secundarias del Consejo General de Educación (CGE).

No contar con edificio propio y compartir espacios con escuelas , por ejemplo, derivó en que en 2022, cuando el CGE dispuso ampliar la carga horaria en primaria, y pasar de 4 horas a 5 horas diarias, las carreras que se dictan en Ciencias de la Gestión se corrieron y concluían a la 1 de la mañana, una situación insostenible. La reorganización derivó en recorte de oferta académica

«Una de las grandes deficiencias de nuestra universidad es la cuestión edilicia. En Paraná tenemos casi 20 mil estudiantes y solo tiene edificio propio la Facultad de Oro Verde, Ciencia y Tecnología. Todos los otros estudiantes cursan en escuelas primarias o secundarias que dependen del CGE. Eso nos origina complicaciones. Es muy difícil la gestión en esas condiciones. El año pasado, cuando se extendió una hora la primaria, dos meses antes habíamos sacado los horarios para el cursado en el segundo cuatrimestre. Pero tres días antes de que empiece, nos avisaron que se extendía una hora la primaria. Eso nos afectó. Los chicos ya estaban inscriptos. No pudimos cumplir con la currícula de las carreras. Esa decisión del CGE nos quitó una hora de clase. Los estudiantes no podían irse a la una de la mañana. Eso fue algo sobre lo que no pudimos decidir nada, porque compartimos edificios que no son nuestros», apuntó Cuenca.

Otra complicación que ocurre con los estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Gestión es la imposibilidad de cursar durante la mañana. «Nos pasó cuando llegamos. Hicimos una encuesta por la deserción. La mayor parte de la deserción ocurre en primer año. Esa encuesta nos mostró que en una de las carreras, Gerenciamiento Gastronómico, la deserción ocurría porque los alumnos empezaban a trabajar. Cursaban de tarde, y el trabajo era de tarde. Cuando la Universidad contó con el único espacio propio en el Campus, destinado a comedor, lo destinamos a Centro Gastronómico, tuvimos la posibilidad de que los chicos puedan cursar a la siesta para que no abandonen. Pero no tener nuestro propio edificio atenta contra nuestros propios estudiantes, que abandonan. Es grave eso», asevera.

 

El 97,88 % del presupuesto de Uader se destina a sueldos.

-El exgobernador Sergio Urribarri anunció, en 2011, la construcción del Campus de Uader y dijo que desde ese momento dejaba de ser una Universidad nómade.

-La Uader sigue siendo nómade. Después de tantos años, el sufrimiento sigue siendo el mismo, la cuestión edilicia, que afecta principalmente a los estudiantes. Desde la Universidad no podemos brindarles la oportunidad de competir con otras universidades porque no tenemos sede.

-Había financiamiento nacional y provincial para terminar el Campus. ¿Qué pasó?

-El edificio que hoy se está construyendo sobre General Espejo está a la mitad. Uader, para poder funcionar con los casi 20 mil estudiantes que hay en Paraná, necesita tres edificios de ese tipo como mínimo. Y hoy tenemos la mitad de uno. Esta situación atenta contra la educación pública.

-Lo que se ve es que hubo un cambio de planes oficiales. ¿Los afectó en la relación con el Gobierno el hecho de haberse sumado a las filas del candidato a gobernador de Juntos Rogelio Frigerio? 

-No. La obra que venía de Nación, que anunció Enrique Cresto. Se paró antes. No llegó el financiamiento por prioridades, que marcó la Provincia. Se priorizó el Planetario, por ejemplo. Y la Universidad no cuenta con recursos para desarrollar obras. El 98 % del presupuesto de la Uader es sueldo. Uader no tiene incrementos presupuestarios en horas y cargos desde 2010, paradójicamente con un crecimiento de esa fecha a hoy de más del 60% en sus estudiantes. EL 98% de su presupuesto está atado a sueldos y lo maneja totalmente la Provincia. Lo arregla con los gremios.

-¿Y la autonomía?

-Como está dada hoy la situación del presupuesto, esa autonomía no es real. Está escrita, pero cuando hay que tramitar, gestionar, no está. Parece que formamos parte de una Secretaría o de un Ministerio de la Provincia, y no es así.

La situación, dice el decano de la Facultad de Ciencias de la Gestión tiene su correlato también en la situación de la planta docente y los salarios. «En cualquier universidad se cobra mínimamente una dedicación simple. En la Uader no pasa», subraya. «Me parece que para el Gobierno no ha cambiado la mirada que tenían de la Universidad hasta la normalización, en 2012. Se la sigue viendo a la Uader como que todavía no está normalizada. Esa mirada atenta un montón contra muchas cosas. Esa es la mirada que se tiene hoy: la prioridad no es la Universidad. Capaz hay otras prioridades. No le encontramos una respuesta a la cuestión edilicia, o a la cuestión presupuestaria.

 

 

 

De la Redacción de Entre Ríos Ahora