Una situación insólita acaba de suceder en el Hospital San Martín de Paraná, el centro de atención médica de mayor complejidad de la provincia.
Este mediodía, y debido a los fuertes olores nauseabundos que despedía uno de los ascensores que está sin uso y en reparación, fue hallado el cuerpo sin vida de un hombre de 66 años.
Se trata de Walter Ignacio Guillen, intervenido quirúrgicamente hace diez días, llevado del quirófano al hospital, pero que misteriosamente desapareció de madrugada sin que nadie atinara a advertir esa situación.
No habían pasado más de 24 horas desde que había sido operado cuando desapareció de la sala que ocupaba en el primer piso.
Guillen había sido operado el miércoles 29 de marzo, pero desapareció en la madrugada del jueves.
Una enfermera relató que el compañero de cuarto reveló que había estado muy nervioso, que fumó y que luego decidió retirarse de la sala adonde había sido derivado, en el primer piso.
Lo que se sospecha es que tomó rumbo al ascensor, que abrió la puerta y entró, sin percatarse que el ascensor no estaba, y cayó al vacío.
El director del Hospital San Martín, de Paraná, confirmó que el paciente hallado muerto este mediodía es Guillén. “Fue reconocido por familiares”, dijo.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.