Él sábado 11, a las 8,30, MAM, 20 años, se presentó ante una dependencia de la Policía en Rosario del Tala y denunció que ese día, alrededor de las 6,30, fue víctima de una feroz agresión en el baño del boliche “Rubia”, ubicado en calle 25 de Mayo, entre Centenario y Panizza. Junto a ella, en el bar,estaba una amiga, TB, de 20.

En ese lugar, en el bar, en baño del bar «Rubia»; denunció ante la Policía, estaban FM, de 17, y MM, de 18. Ocurre una discusión, y MM arroja un vaso con bebida en la ropa de MAM, la denunciante, lo que origina una pelea entre las tres. Las agresiones continuaron afuera del boliche.

En la exposición policial, la víctima dice haber recibido lastimaduras en el rostro, una mordedura en el mentón, golpes en la cabeza con un zapato, “no pudiendo recordar más la denunciante ya que se cayó al piso y no recordó más. Que le dijeron que iban a volver a lesionarla”.

El médico policial Adhemar Beltrán Vallejo constató las lesiones, y dijo en su informe: “presenta edema inflamatorio en frente, escoriaciones en rostro, escoriaciones en mentón y codo derecho”.

El lunes 13, a las 9,40, MAM amplía la denuncia y brinda más detalles de la gresca protagonizada con otras chicas de la misma edad.

Contó que en el amanecer del sábado, cuando quiere ingresar al baño del boliche «Rubia» se encuentra con dos chicas, a las que conoce, de 17 y 18 años, a quienes pidió que “apuraran para que salieran del baño ya que quería hacer mis necesidades, y después de que se tardaron, salen y me contestan que ellas iban a salir cuando quisieran”.

Fue en ese momento cuando una de las dos chicas que estaban en el baño le arroja a la denunciante un vaso con bebida, “a lo que me atajé y se lo rechacé”. En medio de esa triulca, en ese entrevero es que la atacante “atina a arrojar un manotazo”, y como no puede dar en el blanco, “me alcanza a arrancar el top que tenía puesto”.

Sale del lugar con su amiga, y cuando están en el auto cae en la cuenta de que había perdido la funda de su celular: era su “billetera” en la que guardaba $8.000. Baja del auto y se encuentra con sus agresaras y el intercambio de golpes continúa, hasta que interviene la Policía.

La historia del caso se complejizó con la contradenuncia que hizo el lunes 13, a las 7,20, ante la Policía una mujer, VAR, de 47 años, madre de una de las chicas denunciada como la agresora y tía de la segunda. Las dos se encontraban en el baño cuando MAM y su amiga quisieron ingresar. Cuando salen, “observan que eran estas chicas, quienes inmediatamente se van contra ellas”. MAM, denunció la mamá de una de las chicas, “comienza a golpear a mi sobrina, mientras que TB le propina gopes a mi hija; ellas tratan de defenderse, pero al ser más grandes y tener más fuerza, no pueden ahcerlo. Es allí que se encontraban en dicho lugar las separan. Luego, “mi hija y mi sobrina le cuentan lo que pasó a sus primeras; allí nuevamente se trenzan con estas dos chicas.

La contradenunciante asegura que quienes primero se presentaron como víctimas amenazaron a las dos chicas “les dijeron que esto no iba a quedar así, que cuando las vean en la calle iba a ser peor”.

El caso está ahora en la Unidad Fiscal de Rosario del T ala que ahora analiza qué carátula darle al caso y, fundamentalmente, cómo canalizar la situación para que las agresiones no sigan.


De la Redacción de Entre Rìos Ahora