Este lunes 19, a las 9,30, el senador provincial Raymundo Kisser (Cambiemos) deberá presentarse en Tribunales para declarar como testigo en el marco de la causa penal por el supuesto delito de negociaciones incompatibles con la función pública que se sigue al expresidente de Sistema de Crédito de Entre Ríos (Sidecreer), Juan José Canosa.
La defensa de Canosa –quien estuvo al frente de Sidecreer entre 2009 y 201, pero que hoy está a cargo del área Legal de la Cámara de Diputados– pidió la declaración de Kisser y también del conductor radial Ricardo David en el marco del incidente que persigue la recusación del fiscal Juan Malvasio, a cargo de la investigación penal preparatoria. En la causa principal, Canosa está imputado como autor del delito de negociaciones incompatibles con la función pública, en tanto que como partícipes necesarios están familiares y amigos.
Kisser se hará presente para declarar como testigo del incidente de recusación y lo hará sin abogados (“no estoy imputado, sólo voy como testigo”, explicó). En mayo último, cuando los fiscales Malvasio y Santiago Brugo habían dado por concluida la investigación penal y estaban a punto de remitir la solicitud de remisión a juicio oral, los defensores de Canosa, Raúl Barrandeguy y Candelario Pérez, dieron un movimiento sorpresivo: recusaron al fiscal Malvasio.
El 24 de mayo último, al cabo de una audiencia de recusación, la titular del Juzgado de Garantías Nº 1, Susana María Paola Firpo abrió a prueba la recusación contra el fiscal Malvasio planteada por la defensa del extitular de la tarjeta Sidecreer, imputado por el supuesto delito de negociaciones incompatibles con la función pública e investigado también por enriquecimiento ilícito.
La defensa del extitular de Sidecreer, planteó el apartamiento de la investigación penal de la causa Sidecreer del fiscal Malvasio por entender que actuó “irregularmente” al reconocer en forma pública que había puesto en autos de la marcha de la causa al senador Kisser. En su fundamentación, el abogado Barrandeguy sostuvo que hubo una intromisión del legislador en el accionar del Ministerio Público Fiscal, y el fiscal, a su entender, violó el principio de imparcialidad.
Al argumentar su petición, el defensor de Canosa leyó una entrevista a un medio radial en el que Kisser contó que mantuvo una conversación con el fiscal sobre la marcha de la causa Sidecreer. Esa entrevista periodística es utilizada por la defensa de Canosa como fundamento para que se lo aparte de la causa. La entrevista fue en la radio del conductor Ricardo David.
Pero en aquella audiencia del 24 de mayo Malvasio rechazó la recusación, y sostuvo que se trata de una estrategia para dilatar el proceso judicial contra Canosa. No negó la existencia de la conversación con Kisser, pero señaló que sólo se le informó sobre lo que ya era de conocimiento público por audiencias anteriores e incluso a través de los medios de comunicación: que está próximo a remitir la causa a juicio contra el ex titular de la tarjeta Sidecreer.
La pesquisa
¿En qué causa está investigado Canosa, que derivó en el incidente de recusación al fiscal?
El viernes 28 de abril el abogado extitular de Sidecreer estuvo en Tribunales para declarar por segunda vez en la causa por negociaciones incompatibles con la función pública. Ya lo había hecho por primera vez el 10 de febrero
Un día antes de la Navidad de 2016, tres legisladores del bloque de Cambiemos en la Cámara de Diputados presentaron un pedido de investigación a la Justicia sobre el posible delito de enriquecimiento del extitular de Sidecreer, actual asesor legal de la Cámara de Diputados, que preside el exgobernador Sergio Urribarri.
Esteban Vitor, María Alejandra Viola y Gabriela Lena pusieron el acento en el altísimo nivel de vida de Canosa –sus viajes a Punta del Este, su buen pasar económico—hicieron notar que “el principal rubro de consumo” de los usuarios de la tarjeta Sidecreer durante la gestión Canosa no era el rubro alimentos sino las “ayudas económicas, préstamos de dinero en efectivo otorgado por asociaciones mutuales, con la Mutual Justo José de Urquiza a la cabeza”.
El negocio de las “ayudas económicas” terminaba siendo una ganancia para las mutuales. Porque además, para obtener ese préstamo es indispensable, además de tener el plástico Sidecreer, asociarse a la mutual, y esa relación debe mantenerse hasta que se cancela el préstamo.
Los diputados de Cambiemos hicieron que las tasas de interés que percibían las mutuales eran notablemente superiores a las que regían en el mercado.
Pero ya la Justicia venía investigándolo de oficio y a partir de una presentación que hizo el senador Kisser, en 2016. La causa se dividió en dos cuerpos: una por negociaciones incompatibles con la función pública; otra por enriquecimiento ilícityo.
En esa primera investigación están involucrados como partícipes necesarios su hermano Carlos Canosa; la suegra de éste, Mirta Gueler; su cuñada Alicia Cuestas; la cuñada de su hermano, María José Cuestas, y al esposo de la cuñada de su hermano, Diego Urba.
Desde Sidecreer, Canosa compró a su hermano, Carlos Alberto Canosa, a través de la suegra de éste, Mirta Graciela Gueler, por un monto de 262.300 dólares en indumentaria y uniformes para el personal de Sidecreer. También compró a su cuñada, Alicia Susana Cuestas -pareja de Carlos Alberto Canosa-; a la hermana de ésta María José Cuestas; y al esposo de esta última, Diego Aníbal Urba, a través de Excelcom SA, otros 635.000 dólares en insumos informáticos.
De la Redacción de Entre Ríos Ahora.